El tan esperado día había llegado, los dos trolls de distintos géneros musicales, estaban en aquel gran evento que celebraba la unión de Ramón y la reina Poppy, todos estaban allí, lideres, delegados, amigos, familia, ciudadanos, todos muy felices, el amor se sentía en el aire, Wani y Tresillo al inicio tuvieron que separarse, para ayudar a sus debidos amigos a prepararse mentalmente, al final se reencontraron en sus asientos, estaban en el lado del novio, sentados juntos mientras esperaban a que la ceremonia iniciara, los nervios de Ramón se notaban a kilómetros, pero ahora el reggaetonero tenía la vista clavada en su hermosa acompañante, que traía un vestido celeste brillante, y su hermoso cabello recogido en una especie de trenza moño, donde también tenia decoraciones de flores de montaña como ganchos, como maquillaje solo usaba su típica sombra de ojos verde, no necesitaba nada más, su piel ya le daba brillo, sonrió al verla tan emocionada.
Sus hermanas no dejaban de hacerle señas y burlarse de lo enamorado que estaba desde lo lejos, él decidió ignorarlas, hasta que sonó la música nupcial y todos se levantaron de sus asientos para recibir a la novia, Poppy sin duda se veía increíble, la k-popera no pudo evitar pensar en el día que también estaría vestida de novia, giro a ver compañero levemente, sonrojándose de inmediato, luego de que el ex-rey Peppy entrego a su hija y asesino a Ramón con la mirada, empezó la boda, fue tan mágico, tan único, tan todo, los votos tan conmovedores, las palabras, las miradas de ambos trolls uniéndose, era hermoso, no era la primera vez que estaban en una boda, pero no se habían tomado el tiempo de apreciar lo que era antes, y todo lo que significaba, esos dos estaban entregando la vida al otro, estaban sellando su amor permanentemente, cada oración que salía de sus bocas era una promesa de fidelidad y cariño eterno, ¿Cuánto debes amar a alguien para hacer algo así?
Por primera vez, sintieron ganas de llorar de felicidad por la conmovedora escena, imaginando algún día poder compartir ese maravilloso día con el/la troll de sus sueños, el momento finalizo con ambos ya con los anillos puestos y la rosada lanzándose a besarlo, otra vez, todos dieron gritos de alegría, algunos silbidos y los country lanzaron sus sombreros de celebración hasta el cielo, luego de eso, la fiesta comenzó.
Era como cualquier otra fiesta, solo que más elegante y muchísimo más grande, Tresillo estaba en una mesa, comiendo de los bocadillos de todos los tipos que se encontraba, y tomando una que otra copita de vino, sin excederse, desde lo lejos se fijo que Wani estaba bailando junto a sus hermanas, luciéndose, como siempre, se sentía bien a gusto en ese momento, hasta que oyó a DJ Suki gritar "Hora del vals de los novios", casi se atraganta, sabia que luego de eso, seguía uno de sus miedos más profundos de las bodas, el baile lento de parejas.
Y efectivamente, así fue, luego de que la pareja principal danzara su tema favorito "True colors", le tocaba a él, muchos trolls se dirigieron a la pista junto a sus acompañantes, el de cabello amarrado se puso nervioso, y cuando vio a mejor amiga acercarse a él, empezó a hiperventilarse.
—Tracy ¿estas bien? ¿No quieres bailar conmigo? —preguntó Wani algo decepcionada al verlo así.
—No es eso Wani, ammm...no soy bueno...en este tipo de bailes.
—¿Qué? Pero si eres increíble bailando, a eso te dedicas— Le dijo.
—Sí, pero...soy...algo torpe en la danza lenta, sobre todo si es con una pareja, y...no quiero que hagas el ridículo por mi culpa—La de cabello recogido sonrió con ternura por su actitud.
—Yo tampoco se hacerlo, en el k-pop pocas veces hay danzas lentas a menos que sean las tradicionales, pero...no hay nadie más con el que me gustaría intentarlo que no seas tú, no importa si no lo hacemos bien, solo...divirtámonos—Le ofreció una mano y le dedico una cálida y sincera sonrisa, algo inseguros, se pararon y se aproximaron a aquella tabla brillante donde debían bailar.
Tardaron un rato en incorporarse al ritmo lento y suave de la música, incluso llegaron a pisar accidentalmente sus pies o chocar con otros trolls, Tresillo seguía nervioso, así que regreso la vista a su compañera, también estaba perdida, mordía levemente su labio, y no dejaba de mirar sus pies, tratando de controlarlos de la manera correcta, suspiró, y con su mano levanto su barbilla para que pudieran verse a los ojos, sus hermosos iris color azul maya eran el paraíso para él, rápidamente se perdió en ellos, y la contraria hizo lo mismo, sus expresiones y sus rasgos faciales se le hacían de lo más adorable, y no tardaron en relajarse, y poco a poco, los pasos empezaban a fluir y seguir un compás repetitivo, el mundo entero deje de girar, dejo de existir, podrían jurar que estaban volando sobre esa pista, ya ni siquiera veían al resto de parejas, solo eran ellos y la música, se acercaron más al otro, Wani siguió con una mano en su hombro, él con una mano en su cintura, y las dos sobrantes de los dos se sujetaban, cada parte de su cuerpo estaba junta a la del contrario, y sus rostros también se encontraban a escasos centímetros, no era necesario hablar, no era necesario pensar, su vista clavada a la del otro, con la felicidad frente a ellos, solo falto que uno se inclinara un poco...
