64. Cosas Del Destino Larry Stylinson -Terminada

-Veinte-

A la mañana siguiente, el ojiverde se despertó con un terrible dolor de cabeza y confuso miró a su alrededor.

...—¿Cómo demonios llegué aquí?...oh mierda, no debí beber tanto.

Casi gateando, se levantó de la cama y se metió a la ducha, entonces recordó lo que había sucedido.

Su aturdida mente le envió imágenes confusas, las cuales no supo si habían sido un sueño o habían sucedido de verdad.

De repente, asustado se tocó los labios recordando haber besado a Louis pero finalmente desistió pues supuso que lo que recordaba era alguno de los besos dados anteriormente.

Tras secarse y vestirse llegó a la cocina y aliviado vio que el ojiazul no se encontraba.

—Menos mal que no está, no sabría como comportarme... me pregunto si sabrá ya.

—¿Saber el qué?—escuchó tras su espalda.

Rápidamente este se giró, encontrándose al más bajo mirándolo con confusión.

—Bu-Bueno....e-es q-que...

—Hazza, ¿Aún estás borracho?, no debiste beberte la botella entera de whisky, con tu estatura y tu peso pudiste haber tenido un coma etílico, ¿Se puede saber por qué bebiste así?

El ojiverde agachó la mirada.

—Lo siento, te compraré otra botella.

El castaño chasqueó la lengua.

—A la mierda la botella, puedo comprarmela yo...se trata de ti y de tu salud.

—Lo si-siento.

Louis suspiró y acto seguido sirvió café en dos tazas y le dio una al rizado.

—Gracias.

Tras un buen rato observandolo en silencio, finalmente, Louis habló nuevamente.

—¿Se puede saber a qué venía lo de llamarme hermano anoche?, no lo entiendo.

El ojiverde se tensó.

—Emm, bueno...emm yo...

—¿Qué pasa?, habla por favor—le apresuró este

El más alto suspiró muy apenado.

—Mi madre me llamó anoche.

—¿Ah si?, ¿Y qué tal están?, ¿Qué día regresan?

Harry volvió a suspirar.

—Es que no van a hacerlo, no de momento al menos.

Louis lo miró confuso.

—¿Por qué?, ¿Qué ha pasado?

—E-Es que tu padre y mi madre...

—¿Qué ocurre con ellos?—preguntó ya alterado el más bajo.

—E-Ellos se han...se ya han ca-casado.

—¿Que?, ¿qué?

—Eso...que tu padre y mi madre se han casado...e-ellos seguirán de viaje por dos semanas más.

El ojiazul no podía creer lo que escuchaba y horrorizado caminó de un lado a otro de la cocina, sin saber muy bien donde pararse.

—Oh mierda...¿Es por eso por lo que bebiste tanto anoche?, ¿Y por eso fue por lo que me llamaste hermano?

Este asintió.

—¿Es qué acaso no lo entiendes?, maldita sea...eso significa que ahora  tú y yo nos hemos convertido en  hermanos....¡Unos jodidos hermanos!

Tras gritar eso en la cara al más bajo, este salió corriendo para encerrarse en su habitación, donde se tiró en la cama y golpeó la almohada con rabia.

Louis se moría de ganas por seguirle y abrazarlo con todas sus fuerzas pero no lo hizo, ya que creyó que este lo rechazaría, ya que las cosas habían cambiado para ambos.

Por delante, les quedaban aún dos semanas más de convivencia y la verdad, el castaño no sabía como iba a afrontar el ver al rizado tan solo como un hermano, cuando en realidad él lo veía como el ser más lindo y maravilloso sobre la faz de la tierra.

La verdad era que no estaba seguro pero todo aquello apuntaba ser un  macabro plan del destino, el cual lo estaba castigando por haber querido dañar a Harry con su estúpido plan.

No solo debía renunciar a él porque este ya tenía el amor de otro hombre, sino que además, desde ese momento, debía hacerse a la idea de que jamás pasaría nada entre ellos dos pues una hermandad se estaba poniendo de por medio.

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Drama, drama y más drama...😥
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