🍷MI FRÍA BEBIDA🍷

CAPÍTULO XVIII

Oh no puede ser, ahí iba Kardia seguro de si mismo para decirle a aquel sujeto que dejara de ver a su amado, ahí también iba Degel a calmarlo.

Degel: K-kardia

Kardia: Hey tú -llamo la atención del de cabello plateado

¿?: Oh valla, eres Antares Kardia

Kardia: Veo que si me conoces -se cruzo de brazos

¿?: Y ese lindo que está atrás de ti es tu esposo -apunto a Degel, quien no se inmutó a hacer algún gesto

Kardia: Yo solo tengo permitido hablar con él -tipico de los Antares, defender a la persona que más aman

¿?: Me presento, soy Unity, encantado de conocerlo -El joven de cabello plateado y ojos del mismo color le mando un guiño al peli-verde

Degel: Vámonos Kardia, - tomaba la mano del nombrado

Kardia: Solo quiero aclarar una cosa, deberías meterte en tus propios asuntos y dejar de mirar a mi pareja, no quiero estar en prisión por matar a alguien

Unity solo sonrió, pero cuando la pareja se volteo colocó una seriedad en su rostro, que cualquier ser humano se alejaría de él.

Camus: ¿Que crees que haya pasado? -preguntaba mientras abrazaba a Milo

Milo: Realmente no lo sé, ¿Crees que deberíamos irnos?

Camus: Sería mejor, vallamos a otro lugar

Milo: Perfecto -le robo un beso

Decidieron hablar con sus padres tomando la decisión de ir a otra lugar apartado. Kardia era muy famoso así que si le dieron un lugar especial para estar con la familia.

Ahí si ya no hubo ningún disturbio y pudieron descansar y admirar la belleza del mar.

Habían pasado ya los días y regresaron a su hogar.

Dos semana para ser sinceros. Milo seguía con el trabajo de su empresa, a Camus ya no le molestaba la idea de ser su asistente, es más, le encantaba ese puesto.

Camus: Milo, Necesito una firma - le entrego algunas papeles

Milo: Ajá, ¿De que firma? -tomo al de pelo aguamarina de la cintura y lo sentó en sus piernas

Camus: Es para un compra de Vino en el extranjero

Milo: Parece que está inversión será una gran oportunidad para la empresa

Camus: Si, Milo, iré al hospital - abrazo al nombrado del cuello

Milo: ¿Eh? ¿Porque? ¿Te sientes mal? - hasta tocó la frente de Camus

Camus: ¿Te gusta el olor a Sandía?

Milo: Bueno, suele ser dulce pero ¿A qué viene todo esto?

Camus: Tengo una gran necesidad de comer sandía -su voz era tan sumisa

Milo: ¿Sandía?

Camus: Además suele suceder que en el desayuno me da ¿Asco?

Milo: Hoy salgo temprano de aquí, podría acompañarte

Camus: No quiero ir solo - ¿Que le pasaba a este chico? ¿Dónde fue el típico hombre que no se deja de nadie y que siempre anda con sarcasmo todo el día? Tal vez mañana lo descubrirían

Milo: Llamaré a Degel-san para avisarle que dormirás conmigo

Camus: Gracias Milo~