CAPITULO II

872 85 9
                                    


Narra Milo

El día transcurrió muy pero muy rápido, es hora de irme a casa, por lo que se las calles de Grecia a altas horas de la noche puede ser muy peligroso, así que no tomaré esos riesgos.
Después de algunos minutos llegué a casa, mi padre seguro estará hablando por teléfono con su "amigo" que seguro es su novio, pero no me quiere decir, parece que nos vendrán a visitar.

Flashback

-Milo, prepárate, tendrémos visitas en unos días

-¿De quién?

-De....unas personas, se trata de Degel de...-interrumpido

-¿Hablas de el famosísimo Degel Aquarium? El mejor escultor de hielo de todos los tiempos

-exacto, de ese, así que te aviso de una vez para que no me reclames que no te diga nada

-¿Me queda de otra?

-eh..no

-bueno está bien

Fin de Flashback

La mera verdad que las visitas no me agradan, pero como en la casa de mi padre, no me queda de otra más que ser amable con las visitas.

Subo a mi habitación, me recuesto en mi cómoda cama y me quedo viendo el techo, ahora que lo pienso..¿Desde cuándo se ah vuelto interesante el techo? Creo que se volvió interesante cuando supe que Shura y Afrodita eran novios...

Afrodita.....nombre tan encantador para un hombre encantador...es un joven florista que se la vive en su mundo de rosas, es muy amable y muy bello, hasta podría decirse que las rosas mismas le tiene envidia, desde hace mucho tiempo estoy enamorado de esa rosa prohibida ¿Qué porque prohibida? Porque es un amor no correspondido, y se enamoró de otro chico, pero no me quito la ilusión de que una vez me diga -te amo Milo Antares- soñar no es malo..¿Verdad?

Narrador omnisciente

Los días soleados y nublados habían pasado, Camus y Degel el avión habían trasnbordado y para Grecia se dirigían!
Largas y cansadas horas pasaron, hasta que llegaron a la ciudad de los griegos.
Bajaron de el avión y se dirigieron a el centro comercial para que Degel un regalo compará.

Camus como buen francés que es, se apartó de su padre y se fue a visitar dicho lugar, tan distraído iba en sus pensamientos que ni cuenta se dió cuando con alguien choco.

Milo estaba en el centro comercial, como siempre iba a visitar a su rosa prohibida, desde un pasillo antes lo veía, tan embobado que estaba viéndolo, que solo sintió el frío suelo de quel lugar, pues con alguien había chocado.

-Disculpame

-Deberias fijarte por donde vas-dijo en peli-azul

-En realidad yo no estaba embobado viendo a alguien-dijo el de cabello aquamarina

-¿Insinuas que es mi culpa?

-Pues si al saco te queda...

-¿Disculpa?

-yo solo pasaba por aquí cuando un tonto llega y me tira

-¿Ahora yo soy el tonto?

Ambos se levantaron y sus ojos ámbar se encontraron por primera vez.

-es una perdida de tiempo estar hablando contigo

-yo no empeze la pelea

-en primera, no te conozco, y segunda ¡Tu me tiraste!

🍷MI FRÍA BEBIDA🍷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora