🍷MI FRÍA BEBIDA🍷

CAPITULO VI

Camus se encontraba en aquella oficina firmando y firmando papeles ¿Por culpa de quién? ¡Exacto! De el hermoso de su hermanastro, siempre lo tenía ahí como un esclavo era de lo peor trabajar ahí, y con Milo, que siempre lo molestaba.

Tenía una hora de descanso, era un momento exacto para relajarse, y lo estaba hasta que Milo llegó a alegrarle el día.

—Te traje café ¿Gustas?

—Hasta que haces algo bueno —dijo Camus, recibiendo el café

—Que lo disfrutes, me voy

—tomando el cafe pero depronto hizo una mueca de disgusto—Oye

—¿Mandé?

—Esto no tiene azúcar, sabe amargo

—¿No tiene? Es que pensé que entre amargados se llevaban.........—Dijo mientras lo veía con cara divertida

—¿Que te hace pensar eso? —dijo ofendido

—porque eres ¿Amargado? En lo personal me gusta tomarlo sin azúcar, —mostrando una sonrisa triunfante

— ja-ja-ja, que gracioso, no porque a ti te guste sin azúcar quiere decir que a mí igual

—que serio.....ten—dijo dándole un sobre de azúcar—en un momento vengo

—gracias—dijo de mala gana

Después de algunos minutos, Milo llego con Aioria

—¡Buenos días Cam!

—Buenos días Aioria

—¿Te ha causado problemas mi amigo aquí presente?

—No sabes cuántos

—no te preocupes, luego te acostumbras

—Eso espero

—Aioria tenemos que hablar sobre "eso"—dijo Milo sentándose en el sillón

—si voy, nos vemos al rato cam

—Claro

Mientras tanto con los mejores amigos que las sagradas constelaciones hayan elegido.

—¿Entonces fuiste con Kanon?

—si, me habló hace algunos días, y me invitó a tomar algunas copas

— ¿Y que más paso?

—Le dije que lo invitaba a la boda de mi padre, no llevaría a nadie, eso es raro ya que cuando íbamos al colegio era el más guapo y popular del salón

—de eso no tengo duda, sé porque Saga me lo ha dicho que tiene a muchas chicas tras él, pero a nadie le hace caso ¿Que más paso?

—Creo que me pase de copas y ya estaba ebrio, luego se ofreció a llevarme a casa, me subió a su auto y al estar manejando pude notar que no me quitaba la mirada de encima

Flashback de Milo

Milo estaba en el copiloto casi cayendo en los brazos de Morfeo pero Kanon hacia lo posible para que no se durmiera.

El auto negro de Kanon se estacionó frente a la casa de Antares y le empezó a hablar.

—Milo, ya llegamos

— ¿Tan rápido?

—si, es mejor que entres y duermas un poco

—gracias por traerme, ¿Quieres entrar?—dijo mientras apuntaba su casa