A las lejanías de Masachusset, en un pueblo llamado Concordia, existía una familia conformada por cinco hermanas: Anne, Meg, Jo, Amy & Beth, además de un hermano por elección, su vecino, Theodore "Laurie" Laurence, quien como un gesto de agradecimie...
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-Esposa- la llamo Anthony abriéndole la puerta de la habitación del vizconde
-Esposo- lo imito soltando una tierna risita intentando disimular un poco
Estaba nerviosa, sabía que Anthony y ella hicieron cosas indebidas antes de tiempo, pero por las pláticas con su madre aún quedaban cosas por hacer y eso era lo que la llenaba de nervios.
¿Y si no le gustaba a Anthony? ¿Qué pasaría si no fuera una agradable sensación para ella?
Aun no pasaban ni 24 horas como marido y mujer, y ya sentía inseguridades.
No era tan tonta, suponía que además de Sienna hubo algunas jovencitas en su pasado, señoritas con la experiencia necesaria para satisfacerlo y mantenerlo con ellas un tiempo, en cambio ella, toda su vida se había reducido a juegos, obras de teatro y a postergar su inocencia lo máximo posible.
-Vizcondesa- la llamo por detrás mientras recorría con la punta de sus dedos el largo de su brazo derecho sintiendo como su piel se erizaba al instante
Le daba un placer inexplicable el ser testigo de cómo el cuerpo de ella reaccionaba a su toque.
¿Algo más que lo enloquecía? Llamarla vizcondesa.
Desposarla se convirtió en su meta personal desde que la vio ingresar en su presentación ante su majestad y lo había logrado.
Habían sobrevivido a tanto, que el llamarla así instalaba en su corazón un sentimiento de calidez, era como si al final tuviera todo lo que alguna vez necesito, ya no sentía necesidad por algo más... solo plenitud.
