Evony.
Lo primero que hago apenas termino el entrenamiento, es buscar un teléfono y llamar a Hollie. No puedo seguir postergando la llamada. No pude descansar durante toda la noche y, no fue porque haya soñado de nuevo con la muerte de mis padres o cualquier otra cosa. Por muy increíble que suene, desde que llegué a Somber Moon no he soñado con ese día.
La razón por la que no dormí bien, fue Adam.
¡Joder! me escuchó cuando le conté todo a Evolet. Luego de darse cuenta que lo pillamos escuchando nuestra conversación, lo único que hizo fue retirarse sin decir nada. Su silencio no me tranquiliza en absoluto. No es que no confíe en él, porque si lo hago. Pero él sería la última persona que se lo contaría. Vale... tal vez no confío del todo, pero es por su recelo hacia mi.
Y durante todo el entrenamiento no hizo más que ignorame. En especial cuando comencé a soltarles un montón de preguntas a todos, las cuáles ignoraron con un simple: No es el momento.
Hoy comenzamos la fase dos del entrenamiento, y ellos hicieron algo que antes no habían hecho y del cuál ninguno me habló. USARON MAGIA. Asi como una de las mías, solo que ellos pueden controlar una sola. Tal cuál como ví que hacían los otros grupos. Tal cuál como las hadas. Y cuando comencé hacer preguntas, ninguno me respondió. Ni siquiera Des.
Lo cuál no hizo más que frustrarme.
Descubriré como es eso posible.
Evolet me ayudó a buscar un teléfono, lo tomamos prestado de la oficina de Nikki. Al principio ella se rehusó en hacerlo, pero luego de contarle mis razones, aceptó. Aunque seguía un poco preocupada de que nos descubrieran.
Camino hasta la ventana buscando un poco de tranquilidad, al ver hacia el bosque. Evolet está sentada en mi escritorio leyendo otra vez ese libro de sus orígenes, sin prestar atención a su alrededor. Desvío la mirada a la pantalla y sin pensarlo tanto,anoto los dígitos que sé de memoria. Llevo el teléfono a mi oído escuchando el repiqueteo.
Uno.
Dos.
Tres...
—¿Hola?—Suelto un suspiro de alivio al escuchar la voz de Hollie.
Mierda. No me había dado cuenta de lo nerviosa que estaba.
—Dios, Hollie. Hasta que puedo escucharte de nuevo—Siento mis ojos empañarse.
—¿Evony? ¡Oh! Si eres tú—afirma—. No sabes lo preocupada que he estado, estuve llamando a tu móvil muchas veces y nunca contestaste. Asumí que lo perdiste, aunque en el fondo sabía que no era así.
—Han pasado muchísimas cosas, que no creo poder contarlas todas ahora. No estoy viviendo con Elsa, yo... no sé exactamente dónde estoy. Por favor dime qué tú si estás bien.
—Lo estoy Evony y además sé dónde estás. Recibiste mi mensaje ¿Cierto?—pregunta con ansiedad en su voz.
—¿Cuál mensaje? ¿Cómo sabes dónde estoy?
—Había extrañado tanto tus preguntas Evony. Te echo de menos—suelta un sollozo entrecortado.
Escucharla tan vulnerable hace que automáticamente las lágrimas broten de mis ojos.
—Tambien te extraño Hollie, creí que podrías estar en peligro.
—No lo estoy, pero tú si. ¿Te entregaron el anillo?, tu tía dijo que lo mandaría.
Miro el anillo en mi dedo y hago un mohin.
—Se supone que tú me lo darías.
—Lo sé. Te buscaré Evony—Objeta con autoridad.
ESTÁS LEYENDO
DANIN [El Comienzo] #1✓
Fantasia«El color de sus ojos, será la condena de muchos» °°° Evony siempre tuvo una vida alegre, hasta que la desgracia azotó en su vida. Obligándola no solo a cambiar a ella, si no también de ciudad y preparatoria. Ahora vive con su tía y todo parece esta...