A Balto ya no le quedo más remedio que aceptar la muerte de su madre, después del funeral, el fue el último en irse, ya que de verdad le costó ver la tumba de su madre, era algo demasiado para un niño de su edad, pero tuvo que aceptarlo y dejarla ir. Durante el tiempo que siguió a la muerte de Aniu, Balto se estuvo criando con sus padres adoptivos Boris y Estela, un par de gansos de nacionalidad rusa que habían viajado a los Estados Unidos, donde conocerían al cachorro perro lobo y se encariñarian mucho con el, al punto de estar dispuestos a adoptarlo cuando supieron que su madre falleció.
El recuerdo más sagrado que Balto tuvo de su madre antes de partir, fue por supuesto aquel broche de pavo real, que como su madre le indicó antes de morir, el protegió y cuido de él, durante toda su vida, los años iván pasando, pero el jamás pudo superar la pérdida de su madre. Ella era la única compañía que tenía en todo el mundo y aunque pudo entablar una buena relación con sus padres adoptivos, nunca pudo llegar a tener una buena relación con nadie más, poco a poco Balto se fue aislando del mundo y de todos, no salía de casa y no hablaba con nadie que no fueran sus padres adoptivos, nunca se despegó de ese broche que ella le dio y procuraba tenerlo con él cada vez que se sentía solo y triste, que era la mayor parte de él tiempo.
El broche ya parecía desgastado, maltratado, dañado, al parecer por el paso de los años, o al menos eso pensaba Balto ya que tenía unas grietas algo notables en la parte de atrás, pero extrañamente esas eran fisuras que ya tenía cuando su madre se lo dio. Pero Balto no iva a descuidar lo nunca, nuca se lo puso, pero pensó que tal vez sería mejor si lo mantenía guardado y seguro el mayor tiempo posible. La vida de Balto fue relativamente normal, junto con sus trastornos depresivos claro, pero pudo manejarlo, durante bastante tiempo, Balto estuvo llendo a terapias para superar su duelo y empezar a ser más sociable, aún con todo eso su vida fue tranquila hasta cierto punto, hasta que llegó el momento de terminar la preparatoria e ingresar a la universidad.
XXX
7 años después.
La última semana de clases en preparatoria para luego ir a la universidad había comenzado, era el período en el que todos los adolescentes tienen crisis, sobre pruebas finales, opciones de universidad, encontrar quien te lleve al baile de graduación, afortunamente la primera ya había pasado y los estudiantes ya solo estaban asistiendo para cumplir con todo el periodo, ya casi todos sabían la carrera que querían estudiar y muchos planeaban seguir aún en contacto, pero ahora ya iba a comenzar el primer día de esa última semana por lo que la escuela acaba de abrir, aunque la demora en esos últimos días ya no importaba tanto.
Boris : Balto!!! , vas a llegar tarde!
Balto : Ssiii, ya voyyy...."no se porque tengo que pararme tan temprano, son los últimos días de clase y ya no hay mucho que hacer" pensó.
Se despertó de mala gana, y bajo a la cocina para intentar comer algo, lo que alegro a su madre Estela, a ella le gustaba que el comiera junto con ellos, porque luego tenía el hábito de encerrarse en el cuarto cuando se ponía de mal humor.
Su personalidad de Balto la mayor parte el tiempo, era fría, indiferente, solitaria e incluso amargada y gruñona, por todos los acontecimientos anteriores de su vida, pero ya no quería seguir viviendo así, en la escuela no tenía amigos y todos lo veían como alguien raro.
Boris : Balto, dejame pedirte un favor, espero poder contar contigo.
Balto : De que se trata
Boris : Tu madre y yo quisiéramos que, al ser estos los últimos días de clase intentes ser menos distante con todos y intentes entenderte con alguien.
Balto : No se si pueda lograr algo así.
Estela : No puedes vivir para siempre aislandote de todo el mundo, pasaste toda tu adolescencia sin querer hablar con nadie, y ya estas por ir a la universidad, sabemos que esto es ridículo pero hazlo por nosotros.

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Miraculous Balto
FanfictionLa madre de Balto, Aniu ha muerto, pero en su lecho de muerte supo a quien encomendarle su deber como guardián de la caja de los miraculous. Su hijo Balto, pero el no lo supo hasta varios años más tarde. Y cuando ese momento finalmente llegó Balto a...