Un extraño ser en particular, acabo por llamar la atención de todos los que llegaban a verlo, algunos quedaban intrigados al verlo por los aires, y es que el no habría llamado tanto la atención sino fuera por su particular forma de desplazarse, la cual era a través de saltar en los techos de cada casa y establecimiento alto que encontrará, se movía con una agilidad y con una destreza increíble, era realmente sorprendente su buena condición física, pero lo importante era que el no quería cometer el error de llamar la atención de todos así, tenía que cumplir con una misión que era la razón por la que estaba ahí.
Mientras saltaba muy agilmente por los techos de todas las construcciones, se repetía una y otra vez la frase para si mismo ''voy muy tarde "," voy muy tarde", "voy muy tarde", iva muy desesperado pero no era para menos, la urgencia de su problema era realmente un asunto de vida o muerte, y si no llegaba antes que ellos cosas muy malas podrían pasar.
Llegó un punto en el que hizo una pequeña pausa para analizar la situación y saber cómo actuar correctamente ante ella, no podía darse el lujo de cometer ningún error en ella o todo el universo podría pagarlo muy caro literalmente, tenía que darse prisa, sabia que ahora ya habían aún más personas detrás de la caja de los Miraculous, desde aquel fatídico día en que el templo fue destruido y todos temieron enormemente por la vida de Aniu cuando huyó junto con la caja y el grimorio para ponerlos a salvo de ellos, y ahora que supieron que ella finalmente había muerto, y que había cedido la caja a otra persona su temor aumento aun más, si esa persona no estaba concienste de su legado todo sería aún más complicado.
Sacó de su ropa una foto de la persona que tenía entendido, era a quien Aniu le había dejado la caja
"Bien, el es ahora el nuevo guardián, será mejor encontrarlo y explicarle todo lo que ha pasado, es lamentable, pero aunque quisiera no puedo quitarle la caja"
Dicho esto unicamente se limitó a seguir adelante con su camino hasta hallarlo.
XXX
La clase de ese día, había concluido, pero todos sintieron que esta paso demasiado rápido, claro, era lógico, no había mucho para hacer, pero sin embargo no sería tan alegre como muchos creerían.
Se anunció el receso para almorzar y todos finalmente salieron para comer cada uno, su respectivo refrigerio. Balto planeaba como siempre ir a sentarse solo para comer y luego irse a recostar al patio de la escuela a leer. Pero esta vez no sería así.
Unos segundos después de que Balto se sentó, a su encuentro llegaron más personas para pasar más tiempo con el y hacer que se sintiera aceptado y querido.
Rita : Hola Balto.
Tito : Muy buenas amigo.
Thunderbolt : ¿No te importa si no sentamos contigo?
Charlie : Nos preguntamos si podríamos hacerte un poco de compañía.
Balto : Claro no hay problema.
Dicho esto, los cuatro tomaron asiento junto a Balto y se pusieron a charlar con el, logrando hacer que Balto se mantuviera alegre y fuera mucho más abierto con el, en verdad parecía que ya no iba a seguir siendo más aislado y reservado con todos, por primera vez el pudo tener una charla amistosa y tranquila con ellos sin acabar por distanciarse y irse por su lado.
Pero mientras el empezaba a convivir más con sus compañeros de clase, también estaba siendo observado por otras personas a lo lejos, las cuales se sentían algo intrigadas por la presencia del perro lobo.
Sasha, una conocida de Charlie la miraba tan sigilosamente como podía, no quería que el se diera cuenta que ella lo veía desde lejos, nadie tenía idea, pero es que Sasha gustaba de Balto, sin embargo ella sabía mejor que todos que una relación con él, definitivamente iba a ser muy difícil dadas las circunstancias y hábitos para socializar de Balto.
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Miraculous Balto
FanfictionLa madre de Balto, Aniu ha muerto, pero en su lecho de muerte supo a quien encomendarle su deber como guardián de la caja de los miraculous. Su hijo Balto, pero el no lo supo hasta varios años más tarde. Y cuando ese momento finalmente llegó Balto a...