Mi Presa

Capitulo 46: Jugando en la oscuridad

Se le llama semi demonio a todo ser que, por algún motivo, tenga una marcada parte demoníaca. Generalmente, se le considera semi demonio a los que sus almas y esencias se fusiona con un demonio. Dentro de la jerarquía demoníaca, un semi demonio es una formación "sintética" debido a que no se nace sino que se hace.

Muy pocos demonios desean fusionarse con seres humanos, los que realizan esta fusión suelen ser aquellos débiles, heridos o los que son lo suficientemente fuertes para sobrepasar la voluntad de su portador y tomar posesión de su cuerpo físico para sus propios fines.

La gran mayoría de los demonios que realizan estas fusiones suelen ser quienes no tienen un cuerpo físico para entrar al mundo humano e interactuar con este como desearan. O que debido a peleas deciden poseer un cuerpo para recuperarse. Estos recipientes suelen ser seres con pensamientos negativos tan fuertes que son fuente inagotable de energía, para ingresar en esos cuerpos suelen ofrecer algo que el recipiente desee y con ese pretexto poder alimentarse para recuperar fuerzas con el fin de, eventualmente, reclamar el cuerpo como propio.

Pero este proceso es un cincuenta y un cincuenta. El demonio se arriesga a fallar y ser sobrepasado por la voluntad de su portador y desaparecer, volviéndose un humano con las capacidades y conocimientos de un demonio. Mientras que si el demonio gana la batalla de voluntades, será un demonio que posee un recipiente, el cual no podrá abandonar hasta que este fallezca por causas naturales.

La ventaja para los demonios de este trato es simplemente poder probar las emociones, las vivencias y las sensaciones humanas. Como poder procrear con otro humano y generar su propia descendencia cuando sus genes se pasen en generación a un recipiente completamente puro. O poder experimentar los sentimientos desde otro punto que solo alimentándose de ellos.

El proceso es simple, ambos pelearán por el control del cuerpo, el que mate al otro dentro, el vencedor se levantará como nuevo poseedor no solo de los conocimientos, experiencias, ventajas y desventajas, virtudes y defectos del otro sino de una nueva existencia.

Eso es lo que está sucediendo en el interior de Crimson en estos momentos, una batalla a muerte entre él y Hati.

La verdadera forma de Hati, era un lobo negro enorme con ojos amarillos, que tenía un símbolo como una luna ornamentada y su pelaje tenía diseño rúnicos a lo largo de sus patas delanteras y su lomo. Su pelaje, si se lo podía llamar así, parecía moverse como si sufriera de estática. Sus colmillos eran muy pronunciados y todos sus dientes eran muy puntiagudos.

-Todo este tiempo, nos ha traído hasta aquí.- le dijo este en su cabeza parecía no hablar sino comunicarse telepáticamente con el. El lobo se relamió los labios al empezar a gruñir.

-Pensé que me dejarías absorberte...- le contestó Crimson, quien solo vestía un pantalón y estaba desnudo, pero se le veían todas las cicatrices de todas las veces que había muerto, cortes, disparos, apuñalamientos, quemaduras.

-Tu cuerpo se regenera, Crimson, pero tu alma guarda cada una de tus muertes en tu escencia...- le informó el lobo.- ahora esa escencia alimentará la mía...

-Si te crees capaz de matarme, ¡Ven por mí, perro...!- le gritó el guardaespaldas.

El lobo corrió y saltó a matar.

***

-¿Qué le sucede a mi juguete...? - se preguntaba la Evelynn de otro universo al ver que este no se levantaba del suelo, al querer obligarlo a levantarse había decidido a azotarlo con sus lazos.- Levántate, levántate, levántate, cariño...

-¡Demonios! ¡¿Justo ahora, imbécil?! - Aoi quiso correr a protegerlo, pero el gancho de Thresh la detuvo justo a tiempo.

-¿A donde vas...? - se escuchó un disparo que le dio de lleno en la cabeza.- ¡Si el espectáculo recién comienza!