Capítulo 50: Almas condenadas - Parte I

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La mansión de Chad en Los Ángeles era enorme puesto que el terreno estaba conformado por una casa principal y tres casas periféricas que las usaban Derek, Roger y Roy. Cada uno de ellos tenía su propia casa con cuartos para la servidumbre y para invitados.

Las chicas estaban alojadas en la mansión principal donde vivía el empresario, que les proporcionó un cuarto a cada una de la forma que quisieran repartirse. También les dio total libertad para usar todas las instalaciones como y cuando lo quisieran o necesitaran.

La ninja estaba paseando por el enorme patio de la mansión rumbo a la piscina enorme que tenía. En el camino se encontró con Seraphine que estaba disfrutando un poco del descanso y del lugar con su guitarra.

-Hey, Sera ¿Qué haces aquí...?- le preguntó la ninja acercándose a ella para sentarse a su lado.

-Hola, Kali. - le saludó con una sonrisa haciéndole lugar.- estaba cantando un poco...- le comentó la menor.

-Ah... es un bonito día y este es un bonito lugar para ello.- aclaró la ninja, debido a que la propiedad de Chad Miwa no contaba con un jardín parecía, más bien, un parque o un bosque para él solo. Se podrían pasar caminando durante horas y nunca se vería el mismo lugar salvo que uno se perdiera y anduviera en círculos.

Akali aceptó la invitación de la idol y se quedó mirando al horizonte, ninguna de las dos dijo nada, hasta que Seraphine rompió el silencio borrando la tranquilidad de su rostro.

-Estoy preocupada...- Afirmó apoyando su mentón en el instrumento arriba de su mano.

-¿Sobre lo que sucedió ayer con los chicos...?- Indagó la ninja.

-Sí, tengo miedo por Aoi...- la menor no se atrevía a ver a su compañera a los ojos.- no quisiera que nada le pasase y, si debo confesar, tengo un deseo muy egoísta últimamente.

-Cuéntame.

-Quisiera poder tirar todo esto y escaparme con Aoi. Me gustaría presentársela a mis padres.- Sonrió con nostalgia.- seguramente mi padre no la aprobaría debido a la cantidad de tatuajes que tiene y porque es mayor que yo. Pero a la larga aceptaría que soy feliz a su lado y terminaría queriéndola a regañadientes, poder pasar fiestas juntas... no sé vivir una vida normal de pareja. Se que suena estúpido, porque ninguna de nosotras es normal. Pero no sé... es una fantasía que tengo últimamente.

Akali la escuchó en silencio. Colocó su mano en el hombro de la chica dándole su apoyo.- No soy la más indicada para decir algo sobre el amor... pero siento que lo que te sucede, es normal. Creo que todas en algún punto extrañamos la normalidad de nuestras vidas antes de todo esto. Incluso, aunque lo niegue a muerte, Evelynn.

-¿Tu crees?- le contestó la idol mirándola al fin.- me refiero a que Evelynn extrañe el antes de todo esto.

-Actualmente, Evelynn no posee tanta humanidad como antes...- rio un poco.- está bien que nunca fue el epítome de humanidad y amor al prójimo... y se la nota cómoda en la posición en la que está ahora. Pero sé que en el fondo, extraña un poco la sencillez de lo superficial de la vida cotidiana.

-Me gustaría ser más como Evelynn, ¿sabes?- Se confesó la menor volviendo a apoyar su mentón en la guitarra.

-¿En qué? ¿En su incapacidad para controlar sus impulsos sexuales, en su lengua bífida o en su implacable personalidad que es incapaz de sentir empatía por los demás...?- le respondió la ninja con gracia.

-¡Ja ja! No, tonta.- se rio, saliendo un poco de su ofuscación emocional.- en su capacidad para adaptarse a la situación y continuar avanzando.

-Eve se muestra muy fuerte por fuera y da la sensación de que nada te pasará estando cerca de ella porque te va a proteger.- afirmó la ninja.- por esa sensación es por lo que me acerqué tanto a ella cuando recién ingresé al grupo. Es muy magnética y realmente me siento muy bien estando a su lado.- continuó con una sonrisa de confesión.- También por eso le dejo que se propase conmigo cuando se pasa de copas. Nunca entendí porque siempre se me tira encima, aunque por supuesto que si dependiera de mí, la protegería a toda costa de cualquiera que intentara aprovecharse de su estado.

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