Capítulo 33

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"Me preocupo por ti"

Finalmente había terminado de vestirme, y digo finalmente porque había pasado todo el proceso de alistarme entre reproches hacia mi misma por lo que había estado a punto de hacer con Justin... otra vez, así que termine tardándome más de lo que debía y ya me encontraba justo al borde de acabar con la paciencia de Regina, pues según me había percatado, mi madre era una obsesiva en cuanto a tiempo se refería, si tardaba un minuto más seguramente acabaría obteniendo una gran reprimenda. Me observe en el espejo por última vez y comprobé que me veía bastante bien, el vestido era negro y de encaje en un corte de sirena que se ajustaba perfectamente a mi cuerpo haciendo que mis curvas resaltaran, traía puestos algunos accesorios, como un elegante collar que muy a mi pesar Regina había insistido que usara, y como seguramente ya se dieron cuenta, usar cosas de su pertenecía no era para nada de mi agrado.
Una vez comprobé que todo estaba en orden, salí de mi habitación antes de que mi madre enviara a otra persona a presionarme, mis tacones resonaron por el pasillo y pronto vislumbré a Regina que ya se encontraba esperándome al pie de las escaleras, como era usual, su imagen era la encarnación de la perfección.

—Llegas a tiempo.

—Detestaría hacerte esperar.—comente con cierto dejo de ironía en mi voz.

Ella no puso reparo en mi comentario y por el contrario a lo que esperaba, que realmente no sabía que debía esperar, se acercó a mi y arregló ligeramente las ondas de mi cabello para después darme una mirada complacida.
Su gesto me dejó descolocada por unos segundos hasta que me recordé a mi misma que yo no le importaba en absoluto.

—Perfecta.—anunció y yo deseé poder escapar muy lejos—. Es hora.

Se dirigió hacia las escaleras y comenzó a bajar cada escalón con la elegancia que la caracterizaba, yo suspiré y la seguí. Al llegar a la planta principal pude percatarme de que ya estaban presentes la mayoría de los invitados y pronto todas las miradas recayeron en nosotras, en mí en específico, me obligué a no parecer incómoda y me coloqué esa máscara de confianza que me acompañaba a todas partes cuando tenía que representar mi personaje. Esta noche debía ser simplemente Dangerous Woman.

Antes de que tuviera oportunidad de hacer cualquier cosa, Regina enganchó su brazo en el mío y me condujo hasta el recibidor.

—Quiero que conozcas a algunas personas.—informó antes de acercarse a un hombre, este la saludo vivazmente antes de dirigirse hacia mi—. Ariana, este es Clint uno de mis más grandes socios.

Sonreí encantadoramente mientras el
hombre depositaba un beso en cada una de mis mejillas.

—Encantadora.—afirmó el hombre con seguridad—. Eres todo lo que debería esperarse de la hija de Regina.

—No podría ser de otra manera.—concordó mi madre.

—Por supuesto.—elogió el hombre de vuelta antes de dirigirse nuevamente a mi—. He seguido tú trabajo de cerca, Ariana.

Yo arqueé una ceja con curiosidad.

—¿A si? —pregunté como si realmente me interesa—. Me encantaría saber, ¿que encontró?

—Bastantes similitudes, si me permites ser sincero.—contesto y yo lo observé con confusión a lo que él dio paso a explicarse —. Estuve presente en el crecimiento de Regina,
observé como pasó de ser una novata a convertirse en la mujer más poderosa del momento, y ahora, lo mismo sucede contigo.—hizo una pausa para permitirme procesar lo que decía—. Observó ese mismo patrón en ti y en tu trabajo... es asombroso, y eres capaz de llegar muy lejos si sigues los pasos de tu madre.

Me contuve de hacer una mueca incómoda y continué con una amplia sonrisa en el rostro.

—Es un honor ser puesta a la altura de mi madre.—mentí descaradamente, observando a mi madre con una expresión falsa de orgullo.

Dangerous Love 2 »jariana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora