Renacer ✔️

⚡️Sola ⚡️

Un día como hoy, hace un año, mi hermano se fue a una misión secreta.

Todos los días he visto los trescientos sesenta y cinco vídeos que me hizo para no sentirme sola y, aunque me recordaban que él estaba ahí, siempre sentí el peso de su ausencia. Hoy he terminado de ver el último vídeo en el que me decía que llegaría para mi cumpleaños con el pastel de chocolate y pecanas que tanto me gusta, así que se podría decir que es la primera vez que estoy feliz en el día de mi cumpleaños.

Espero por varias horas a que llegue, incluso Gavin, mi mejor amigo, sugirió ver una película que descargó de algún sitio web ilegal, mientras esperábamos, pero las horas pasaron y el toque de queda ya estaba cerca, así que Gavin tuvo que marcharse. Lo despido en los pasillos del edificio justo cuando él escanea su retina en el biométrico del ascensor, se enciende una luz verde y las puertas se abren. Él ingresa, levanta la mano para despedirse, luego las puertas se cierran. Me asomo por la ventana y lo veo salir del edificio mientras cuatro soldados lo interrogan y después de unos segundos le abren el paso. Espera en la parada de taxis por un momento, hasta que llega uno y se sube.

Me vuelvo hacia mi departamento, me siento en el mueble y suelto un suspiro.

¿Por qué no habrá llegado Colin?

Siento algo extraño revolviéndose en mi pecho, así que enciendo el televisor y veo las noticias para olvidarme de esa sensación. El presentador un hombre alto, piel blanca, ojos y cabellos plateados, está hablando sobre la última etapa del desarrollo de los nuevos aviones VF86 de Las Fuerzas Aéreas de La República de Las Américas, los cuales son veinte veces más veloces que los aviones que usaron en la guerra cuando conquistaron México y Canadá. Ahora, casi toda américa del norte le pertenece a La República de Las Américas, lo que nos ha permitido ser una potencia mundial y el primer país con mayor territorio y poderío militar.

"En otras noticias, este once de septiembre se realizará el reclutamiento de los jóvenes que ya cumplieron dieciocho años para que formen parte de las fuerzas del orden. El gobierno de La República de Las Américas te recuerda que, al presentarte de forma voluntaria podrás acceder a un salario mensual, crecimiento profesional, una bonificación extra para tu familia, seguros de vida, acceso a educación a hermanos menores, entre otros beneficios; caso contrario, estarás incumpliendo el Artículo 166, inciso 6 de La Nueva Constitución de La República de Las Américas. Jóvenes, servir a nuestra patria es nuestra responsabilidad."

Hago una mueca de desagrado. Hoy cumplo diecisiete. En un año, es probable que forme parte de Las Fuerzas Armadas a menos que vaya a una buena universidad y tenga un propósito de vida que ayude a mi país. Desde que somos pequeños en la escuela nos entrenan física y psicológicamente para la guerra: manejo de armas, clases de armas y balas, lucha cuerpo a cuerpo, camuflaje y persecución, técnicas para trepar edificios, juegos de guerra virtuales y presenciales con balas de goma, tipo de construcciones, entre otros. Desde que tengo uso de razón tengo la desagradable idea latente de ser un soldado para mi nación, sin embargo, mi hermano, quién si tuvo que ir al reclutamiento, no quiere lo mismo para mí. Por eso, Colin ha trabajado duro para que yo pueda tener la posibilidad de estudiar en una universidad, pero al no formar parte de la élite, lo más probable es que me toque ser parte de la fuerza militar. Al menos yo tengo una pequeña posibilidad, porque los "errantes" (como vulgarmente llaman a los inmigrantes o refugiados de los países que conquistamos), tienen pase directo para ser nuestros soldados. Claro que eso no lo menciona el presentador, pues las noticias solo están hechas para los ciudadanos legales y puros de nuestro país. Sí, puros. Y a esto me refiero a aquellos que tenemos una línea de sangre por décadas de descendientes de La República de Las Américas. Esta característica se refleja en nuestro físico: piel blanca como la nieve, ojos y cabellos plateados.