Elthon y yo salimos del edificio y subimos a su Jeep. Un apagón otra vez nos deja a oscuras. Las luces de los focos delanteros nos muestran el camino.
—¿A dónde vamos? —le pregunto.
—Necesito mostrarte cuál será el próximo circuito del campeonato —responde con calma. No quita la mirada del frente.
Frunzo el ceño.
—¿El circuito final? —Él asiente—. ¿Cómo saben eso?
—Nosotros tenemos algunas personas infiltradas en la organización de El Diablo. También otras de su bando que quieren pasarse al nuestro. Esta persona, trabaja en el monitoreo y diseño de los circuitos de todos los campeonatos de Motocross Neón.
Las luces de su auto le llenan el rostro de sombras extrañas.
—Pero, ¿cómo pueden confiar en alguien que trabaja para El
Diablo?
Él esboza una sonrisa.
—Es un seguimiento el que se hace, igual al que yo te hice —confiesa. Me siento intimidada y hasta creo que se me sonrojo—. Él, al igual que nosotros, tiene razones poderosas para no querer seguir trabajando con El Diablo. Para resumirte la historia, sus padres fueron asesinados en situaciones extrañas en un asalto en su casa. ¿Qué podrían robarles a unos viejos pobres? Con el pasar de los años, descubrió que fue su propio jefe quien ordenó que los maten —cruza una curva y sigue de frente—. El Diablo hizo lo mismo con varios de sus hombres. Les quita la única razón por la que viven, luego él les da una nueva vida y otra razón de ser: servirle a él.
Me quedo pensando. ¿Con qué tipo de personas estoy tratando? Son muy peligrosas, tanto que manejan una sustancia que pone en riesgo la vida de todos y que han sabido esconderse de las organizaciones que nos dan seguridad. Tal vez, debió ser mejor olvidarme de lo que le hicieron a Colin y dejar las cosas como estaban. Ahora, por ser impulsiva, Gavin está muerto. Muerto por mi mano. El fantasma de mi padre, con su cinturón en la mano, flota en el aire. Cierro los ojos con fuerza hasta que se va.
—Lo mismo te hizo a ti; a mí —susurro.
Elthon no pestañea ni muestra ningún gesto que lo haga ver vulnerable. Lo comprendo, la vida lo ha vuelto duro. Sin embargo, él no sabe que podrá encerrar a sus demonios cuando está despierto porque, mientras duerme, vuelve a ser el niño que vio morir a su madre y hermanas.
Miro a mi alrededor, solo hay oscuridad por todos lados. De pronto, la luz llega. Elthon apaga las luces de su vehículo.
—Tarah, quizás tu llegaste hasta aquí a buscar venganza por tu hermano, pero tu talento y tu fuerza ha hecho que muchos vean en ti a alguien que puede ayudarnos en esto. Es cierto que tú eres una pieza más en este rompecabezas gigante, sin embargo, eres una de las más importantes.
Bajo la mirada.
—Yo solo quiero capturar al asesino de mi hermano y llevarlo a arriba.
—Eso dalo por hecho —comenta—. Ahora, ese también es mi objetivo.
—Y si las cosas salen como las estamos planeando... ¿Qué pasará con el Turbo Neón?
—No prometo desparecerlo, pero sí ser más responsable al usarlo. El Tubo Neón es todo para nosotros.
—¿Cuán letal puede llegar a ser?
Elthon al fin me mira, luego sigue concentrado en el camino.
—Mucho —contesta sin más.
Creo que hay más que no me quiere decir. Estoy segura que el Turbo Neón es muy peligroso. ¿Si llevo conmigo a arriba al asesino de mi hermano, le diré a las autoridades sobre Los Sótanos? Quizás. No puedo poner en riesgo tantas vidas.
ESTÁS LEYENDO
Renacer ✔️
Научная фантастика[Primer libro de la trilogía "Renacer"] Mataron a su hermano, ahora buscará venganza. ••• La República De Las Américas, lo que antes era Estados Unidos, se ha convertido en la potencia mundial después de someter a varios países y proclamarlos como s...
