lighthouse » l.h

7.

—Cierto, lo había olvidado —le espeté y su sonrisa desapareció —. ¿Cuánto es?

—Son 40 dólares —le entregué el dinero y cargué las cosas en mi, ahora, pesada mochila.

—¿Necesitas ayuda con eso? Estoy por terminar mi turno y no me molestaría acompañarte a casa —dijo y lo pensé.

¿Quería que Luke me acompañara? No me vendría nada mal ayuda con mi mochila...

-Está bien, puedes acompañarme -murmuré y Luke sonrió -. Sólo porque no quiero cargar esta mochila 10 cuadras.

—Claro que sí, Walker —rodé los ojos y él rió, contagiandome una sonrisa. Había extrañado su estúpida risa, mierda —. Jacob, ya me voy —exclamó Luke y se encaminó a los vestidores —. Esperame aquí, ya vuelvo.

    Asentí y dejé la mochila en el, no tan limpio, piso.

—Esos pantalones no te quedaban nada mal —me burlé y Luke rodó sus azules ojos. Tomó mi mochila y nos dirigimos a mi casa.

—¿Por qué no contestabas mis mensajes? —cuestionó Luke, rompiendo el silencio.

—Luke... el día que fui por última vez al faro te ecuché hablar por teléfono con tu novia y cuando me quisiste besar me sentí culpable. —murmuré, sin mencionar mi propio problema.

—Julie, siento haberte casi besado —sonrió —, perdoname y dame una oportunidad, prometo ir despacio... —lo mire incrédula —. Me corrijo, prometo que todo será como antes del casi beso —me reí y asentí.

—Está bien, te perdono —le extendí mi dedo meñique y él me miró confuso —tenes que jurarlo por el mequiñe. —Luke carcajeó y entrelazamos nuestros meñiques —. Aquí es, gracias por acompañarme y traer mi mochila.

—No es nada, ¿prometes volver mañana? —hizo un puchero con sus labios y le sonreí.

—Quizás, Luke —tomé mi mochila sonriente y me despedí de él, abriendo la puerta

(...)

—Así que, ¿quién te acompañó a casa el sábado? —preguntó Michael y yo sonreí, dirigiéndonos al Instituto.

—Luke Hemmings —murmuré y Mike negó con su cabeza.

—¿Le darás una oportunidad? —contestó y me encogí de hombros —. Julie...

—Lo sé, "tienes que darle una oportunidad" —imité su voz y él rió.

—Me preocupo, ya sabes —susurró y asentí. Seguido, entramos por la gran puerta principal y me dirigí a mi casillero.

(...)

—¡Te encontraste a Luke en Target y te acompañó a tu casa! —exclamó Tessa, en el parque trasero del instituto, donde nos encontrabamos almorzando —. ¡OPD! (N/A: Oh por dios)

—¡Tessa no grites! —le espeté y ella asintió divertida.

—Lo siento, pero, ¡ese chico no puede ser real! —me reí y ella Tessa me imitó.

—¿Vamos al gimnasio ya? —pregunté y ella asintió, desanimada ya que nos tocaba educación física.

—Buenas tardes alumnas, hoy haremos calentamiento y prácticas de pases y saques para volley ya que el torneo se acerca. Elijan sus parejas y comiencen a hacer pases de manos altas.

    Tessa rodó los ojos y caminó hasta el cesto de pelotas, tirándome esta de mala gana.

—Hagamos esta mierda —murmuró y nos reímos.

    La clase había finalizado y me encontraba caminando hasta mi casa con mis auriculares puestos.

—Hola mamá —saludé a Amanda, ella me sonrió y besó mi mejilla. Seguido, subí hasta mi habitación y me dediqué a hacer la aburrida tarea de Historia.

(...)

    Luego de cenar, me sorprendí a mí misma pensando en ir al faro. No perdería nada, Luke prometió tratarme como a una amiga y eso es lo que quería, ¿verdad?

    Indecisa, me coloqué la chaqueta de Luke encima de una blusa azúl y, como todas las noches antes del "incidente", bajé por mi ventana y corrí hasta la playa.

    Abrí la puerta y subí cuidadosamente las altas escaleras en forma de caracol.

—Hey —murmuré y Luke abrió sus ojos azules como platos, sorprendiéndose de mi llegada.

—Juls, pensé que no volverías... —imitó mi acción y me encogí de hombros.

—No perdía nada en venir y además —hice una pausa y me despojé de la chaqueta de Luke —. Tenía que devolverte esto. —Sonrió y negó con la cabeza.

—Creo que deberías quedártela, te queda mejor que a mí —sonreí ante su cumplido y negué.

—Pero es tuya, quédatela —le espeté y volvió a sonreír, mostrándome sus adorables hoyuelos.

—Por favor, tengo más chaquetas —asentí dudosa y volví a ponerme la prenda, reconfortándome con su calidéz —. ¿Cómo has estado?

—Supongo que bien, ¿y tu? —respondí, colocándome junto a él, para después apoyarme cuidadosamente en la barandilla.

—Supongo que bien —susurró —. Siéndote sincero, no tanto. Tuve una pelea con mi novia y, bueno, no salió como esperaba...

—Oh Luke... ¿terminaron? —murmuré y coloqué mi mano en su hombro.

—No, nada de eso. —Se pausó —, seguimos siendo novios, sólo que... las cosas han sido complicadas. —asentí y le dediqué una tímida sonrisa —. Te extrañé, ¿sabes?

—Luke...

—Lo siento, no debí decir eso. —se retractó y posó su mirada en las olas que se formaban en la orilla.

—Yo también te extrañé —hice una pausa y Luke me miró, sorprendido —. Quiero decir que, extrañé venir a este lugar... —me sonrojé y él sonrió —. Debería irme, Luke.

—Entiendo, ¿nos vemos otro día? —me sonrió ampliamente y asentí, volviendo a tomar el camino a casa.

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¡Hola! Sé que no llegamos a los votos indicados ((sólo por uno ahre)) pero, como en una semana empiezo la escuela, quería subir este capítulo. Voten y/o comenten si les gustó. Las adoro, gracias por todo.

Nos leemos, xx