Compañeros

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     Un nuevo día invade el país Americano y los nuevos refuerzos para el ejército estaban listos para ser entrenados

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     Un nuevo día invade el país Americano y los nuevos refuerzos para el ejército estaban listos para ser entrenados. Katherine fue la última en levantarse de la cama y se enlistó rápidamente para ir a desayunar e irse a formar. En medio del apuro chocó con uno de los soldados que estaban siendo "Candidateados" para recibir el suero, miró de pies a cabeza la figura de la castaña y con solo la mirada se le insinuó. Katherine rodó los ojos y tras de el iba aquel joven siguiendo sus pasos, ignorándolo por completo y buscando a Steve cuanto antes.

     El día estaba nublado y para Katherine era un día importante, quería conocer a la mujer que mencionó Erskine quien iba a supervisar este tema:

«Margaret Carter»

     El interés de la castaña cada vez aumentaba en conocer a aquella mujer, en sus pensamientos creía que era otra rata de laboratorio del Doctor Erskine aunque lo consideraba una idea loca. Al salir al campo de entrenamiento, encontró a Steve formado junto a los demás y en su apuro, se colocó a su lado mientras este la veía como esta estaba bastante agitada.

—Reclutas, ¡Atención! —Mencionó firmemente una voz femenina—. Caballeros y señorita, soy la Agente Carter, vengo de Inglaterra para supervisar sus operaciones.

     La Agente se mostró firme llamando la atención de la castaña, quien aún no aceptaba el hecho de que las mujeres no podían estar en el campo de batalla. La agente se reveló con un vestido militar y un cabello corto peinado radiante con un poco de maquillaje, esta estaba a punto de detenerse ante la única chica entre los candidatos hasta que uno de ellos habló.

—¿Por qué de Inglaterra, Reina Victoria? —Mencionó irónico el soldado—. Creí que era el ejército Norteamericano.

—¿Cuál es su nombre, Soldado? —Habló la Agente, seria.

—Gilmore Hodge, Majestad —Respondió, en un tono irónico.

—Paso al frente Hodge —La Agente no le quitaba la vista—. Pie derecho al frente.

—¿Quiere luchar? tengo unas maniobras que le encantarían.

     No pasó ni un segundo cuando un certero derechazo de la Agente Carter hizo que tirara a Gilmore al suelo, dejándolo desorientado por unos segundos. La pequeña carcajada que soltaron Steven y Katherine hizo que se ganara la mirada de la Agente por unos segundos hasta que la voz del Coronel Phillips se hizo presente, haciendo alusión a la presión de los candidatos.

—El General Patton dijo que las guerras se pelean con armas pero se ganan con hombres fuertes —Mencionó el Coronel —. Pero esta la ganaremos nosotros por que tenemos a los mejores... hombres —El Coronel Phillips guió su mirada hacia Steve y a Katherine, siendo notoria su diferencia de altura y algo de contextura—. Y por los que serán aún mejores, mucho... mejores.

     El largo entrenamiento diario fue una tortura para Steve, quién era el más débil del grupo, pero siempre era ayudado por Katherine. Cuando subía las cuerdas, Steve era bastante torpe y lento, Katherine en su motivación, alentaba a su compañero para seguir adelante y no se cayera. En las trincheras, mientras pasaban por debajo de los alambres de púas, Hodge impidió el paso de Steve rompiendo unos trozos de madera, dejando atrapado a Steve y manchando de barro el arma que cargaba, cuando Hodge salió, su mirada guió hacia Katherine mientras esta lo miraba furiosa y le propinó un cabezazo fuerte al matón, dejándolo nuevamente en el suelo como lo hizo la Agente Carter.

¿Tomarás mi mano? - Howard StarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora