Capitulo 3. Arruina-citas

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- ¿Que haces? - dijo la voz de Jenny a mi espalda, haciendo que saltase por lo desconcentrado que estaba, o lo concentrado que estaba en lo que no debía estar... ¿que más da?

- ¿Ennggg? - le dije haciéndome pasar por tonto, ha veces cuela....

- Si, ¿que haces aquí fuera? - me miró como queriendo descifrar mis secretos, observando fijamente mis ojos, no debió ver gran cosa.... ya que prosiguió.. - No me mires como si la loca fuera yo, porque estás loco como una cabra. RECAPITULAMOS. Te escapas corriendo, sin motivo aparente, me quedo un rato dentro, esperando que termines la broma y vuelvas al interior de la librería.... pero no, cuando me canso de esperarle, me encuentro el señorito “pasmao” mirando las musarañas del final de la calle....¿ES ESO NORMAL??

Genial, estaba metida en un lío. Si digo que había una mujer dentro de la librería va pensar lo que no es (que es lo mismo que yo desearía.... ) pero no estamos ablando de mis deseos, sino de la explicación COHERENTE, que tengo que darle a mi amiga. Además suponiendo que aceptara esa opción, me metería en un lío muy grande, ya que creería que me había olvidado de ella por Susan (lo que es en parte, y muy gran parte CIERTO). Pero hoy dejaremos la honradez a un lado, y diremos una mentira piadosa, todo por no herir los sentimientos de mi mejor amiga. Yo la entiendo, si hubiese sido su idea ir a cenar, porque me viese raro, y luego me deja plantado por estar “tonteando”, “hablando” o lo que hiciese con otro hombre, también me molestaría.

Solo me queda el PLAN 2. Aunque me cueste mi reputación.

- ¡¡¡¡¡NO TE LO VAS A CREER!!!!! - eso, ¿que era lo que no se iba a poder creer?

- ¡NOOOOOOOO ME DIGAS! ¿Y supuestamente, que es lo que no me voy a poder creer?

- Ya sabes las ganas que tengo de conocer a la estrella de los Lakers, a Paul, y me pareció verle pasar.... y ya sabes... ME PUDO MI FANATISMO....

- ¿Tu “fanatismo”? - me miró alzando demasiado las cejas – Marcus, de verdad, hoy estás muy raro.... Será culpa de los Lakers... o de quien tu quieras....

- De verdad, estoy bien...

- Vale, vale – me dijo poco convencida – Oye, ¿terminaste?

- Si, estaba con los últimos detalles...

- Pues me debes una cena.... asique....

- Debo ir a cambiarme a casa...

- Pues tira, anda – dijo empujándome fuera del local.- Venga que quiero comer.... y antes de mañana a poder ser...

Cerré la puerta con llave y empecé a caminar al lado de mi amiga.

- ¿Que te pasaba a la tarde? - le dije observando que estaba como siempre....

- Nada, en serio...

A ContracorrienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora