"Los hombres somos como los vinos: La edad agria los malos y mejora los buenos"
Marco Tulio Cicerón
⁎⁎⁎
[ Demian ]
Es extraño saber cómo tan solo una persona puede cambiar totalmente tu vida en un solo parpadeo, hace un par de meses hubiera creído que eso sería imposible cuando pensé tener el control absoluto de mi vida, y que en ningún momento llegaría alguna sorpresa que terminaría por romper las rutinas y reglas que había impuesto a mi favor para seguir adelante sin dar un paso hacia atrás. Sin embargo, solo basto una simple llamada telefónica por la mañana para que mi mundo diera un enorme giro logrando que todo lo que había construido se derrumbara en un solo instante.
La llamada fue corta, que ni siquiera pude tener el valor suficiente para reaccionar hasta que el sonido del pipeteo sobre que habían colgado fue lo que me hizo volver a la realidad; perdí la cabeza no un par de minutos o una hora, la perdí casi un día entero al recibir sorpresa tras sorpresa que me cayeron como bombas que intentaban atacar todo mi cuerpo, primero la que habían implantado mi esperma en una mujer, segundo, al saber que tendría un bebé de mi sangre y el tercero, que la madre sería una de mis empleadas.
Hacerme la idea de que en unos meses sería padre fue tormentoso, más, porque me sentí parte de ese porcentaje de hombres que a veces no se siente preparado para este tipo de noticia, pero en mi ocasión, me sentía como un adolescente que acaba de dejar a una chica menor de edad embarazada al no haber sido cuidadoso en usar protección; el ejemplo es malísimo pero así me sentí por un momento que no supe lidiar con la situación.
Pensar que una mujer llevaría mi hijo o hija en su vientre provoco que sintiera pánico, tanto, que me rehusé a una estúpida y alcanzativa idea de afrontar el problema con una antigua solución que antes hacían las personas cuando dejaban a una mujer embarazada fuera del matrimonio: «comprometerse con esa persona para darle un apellido legitimo al bebé».
Quizás haber pensado en ello fue precipitado cuando no conocía muy bien a esa mujer, ni tampoco su vida y la intención que tenía de seguir llevando a un bebé por equivocación que no tendría sangre de su marido. Algunos en mi lugar hubieran pensado en lo peor con estás ideas, pero en aquel entonces había sido más intuitivo que racional, que casi me costó la separación de mi próximo primogénito que tuve que analizar mejor las cosas de forma paciente y con la cabeza fría.
Mi ignorancia fue haber pensado en lo peor sobre Danika, herir su dignidad, ganarme fácilmente su desconfianza y omitir una comunicación asertiva que deberíamos haber creado desde un principio para aceptar lo que el destino nos otorgó. Realmente no podría decir si su sentido maternal o su forma de ser fue lo que me hizo comprender repentinamente sobre quien era. En ningún momento, intentó apartar la conexión que podría tener con el bebé, más bien, fue la primera en tener la iniciativa para darme un motivo de reintegrar aquel tiempo que perdí al lado de mi hijo o hija por mi propio miedo.
Ahora, me parece increíble como la situación entre ambos mejoro, tanto que, algunas cosas se deslizaron de nuestras manos a punto de que nuevamente ella fuera la primera en tener la valentía suficiente en cruzar los límites que yo mismo impuse, sin embargo, luego proseguí a romper más las reglas que ambos juramos no quebrantar bajo un contrato. Aun así, sigo sin poder asimilar todo ello y más la sensación que Danika me provoca cuando estamos muy cerca.
No puedo ni siquiera describir en unas simples palabras, todo lo que ella me hacer sentir de forma ajena cuando no tengo tampoco idea, si estamos envuelto bajo el mismo sentimiento que ha recobrado confusión en mi cuerpo, ¿por qué lo digo? Porque esto no es como lo que sentí cuando estuve con Gredel, con ella simplemente el amor recobró de una forma ciega al no ver la realidad de las cosas que tenía frente a mis ojos y de las cuales nunca dudé como fue la relación que ella tenía con mi hermano gemelo.
ESTÁS LEYENDO
Jefe, tendré un hijo suyo
Chick-Lit-Repítelo otra vez, que no estoy comprendiendo absolutamente nada... Tomo suficiente aire para darle primero una mirada a su hermana y luego a él, siento como los mareos empiezan a aparecer, como también, mi sangre se vuelve fría al ver su rostro ll...