40. Si total

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Voy a morir de amor y vivir de pena,

en una vida de imagen distorsionada

y de mente enferma,

dibujando parábolas,

intentando trazar corazones no resquebrajados

por el frío,

como el que tengo aquí dento,

con un ángulo perfecto

para disparar en el centro.

Voy a escribirte dos mil cartas

y las enviaré a mi propia dirección,

para intentar recordar

por qué siento todo esto

cuando fuiste tú el que más daño

me dejo en los adentros,

exceptuando tu seducción

innata

y dejándome hecha escombros.

Porque ahora vivo en el recuerdo de ti

y de mí siendo muy tú,

de ti, en lo más profundo de mí

y de yo, siendo perdida un ¿quién?

Tan perfecto se quedó el amor

que lo imperfecto a veces sale mejor,

mejor darse a la improvisación,

¿no crees, corazón?

Y me hice tantas preguntas

que nunca me llevaron a ninguna respuesta

sino a otras dudas

de las cuales era prisionera,

que,

por qué incertidumbre

pudiendo amar con pena

y tal vez

un poco de desconfianza en vena.

Pero me moría sin el agua

del pez ahogado en una bañera

con complejo de ballena

en un vaso de tequila

sin limón y con sal en la herida.

Una de cal y otra de arena,

amigo, tú que tanto,

yo que tan poco

pero a la vez tan unidos.

Que me maten,

si total,

yo muero por ti,

tú te proteges conmigo,

acabaré siempre por ti,

amor mío.

Versos hechos de InsonmnioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora