Blue & Grey ⚘ | KookTae |

Capítulo 15

Con una emoción creciendo en su pecho y una sonrisa formándose en su rostro, Taehyung llegó a esa prestigiosa universidad siendo oficialmente un miembro docente de ella.

Con su portafolios colgado de su hombro derecho y su estuche de herramientas artísticas asegurado en su mano izquierda, Taehyung dio los pasos necesarios hasta que ingresó en la institución.
Enseguida se topó con la cabina de seguridad, en donde un asistente de la misma le pidió su identificación, una que Taehyung no tardó casi nada en sacar de su bolsillo y mostrársela lleno de orgullo. Porque no recordaba cuando había trabajado tanto y tan duro para obtener un objeto tan pequeño como ese. Tenía que presumirla.

Sus esfuerzos habían dado frutos.

Ahí estaba, registrado en el Sistema de la Universidad de Sogang en Estocolmo como uno de los selectos profesores de renombre de la Academia de Artes. Y también el mejor evaluado de su curso, cabe destacar.

Después de cuatro meses de haber pisado tierras suecas y luego de haber concluido todos sus cursos preparativos para ser libre de dar clases, Taehyung finalmente era un profesor de Arte en aquella institución.

La prestigiosa Universidad de Sogang.

Una entidad educativa privada dedicada especialmente para la comunidad asiática en Suecia. La mayoría de estudiantes eran procedentes de países como China, Japón y por supuesto, Corea del Sur.
Aunque también podría encontrarse alumnos de otros países, éstos siempre eran minoría.

Para suerte de Taehyung, quien no hablaba ni chino ni japonés, sus alumnos eran todos de nacionalidad coreana, por lo que se le facililitaría la interacción con sus jóvenes aprendices, quienes no rebasaban los 20 años en su mayoría, a la vez que podría explicar mejor la dinámica de sus clases.

Taehyung estaba emocionado como pocas veces había estado en los últimos meses. Por fin estaba subiendo en esa escalera hacía su propio éxito. La gente comenzaba a verlo, las personas lo reconocían y admiraban sus trabajos.
Su dedicación había válido la pena, tanto que ahora se le permitía estar ahí, pisando esas tierras extranjeras como un representante de su país en el ámbito artístico. Y no sólo eso, también había sido seleccionado para enseñar a otros sus técnicas y habilidades.

Taehyung llevó su mano al pecho y trató de controlar su respiración. Por un momento pensó que se pondría a llorar ahí mismo. Los sentimientos le abrumaban y le estaban haciendo doler el pecho en demasía.

Quería un abrazo de Jungkook.

Necesitaba a Jungkook ahí mismo.

Deseaba con todas sus fuerzas que su precioso azabache estuviera ahí con él para decirle palabras de aliento y le diera ánimos.

Porque a decir verdad, fuera de toda esa emoción y alegría que sentía el castaño en esa mañana, el miedo y la incertidumbre también le estaban invadiendo. Habían sido meses bastantes complicados para Taehyung desde su llegada a la ciudad.
Desde las primeras horas de su travesía todo fue un total tormento para Taehyung. Tantas cosas y tantos sentimientos se mezclaron en tan poco tiempo que por poco tiraba la toalla y se regresaba a los brazos de Jungkook sin siquiera haber comenzado su vuelo.

El viaje de avión había sido el inicio de todo, el castaño aún sentía su estómago resolverse cada que pensaba en ello.

Una pesadilla en pocas palabras.

Primero, la sensación de estar alejándose de su esposo le hizo casi morir ahí mismo. Taehyung quería mantenerse fuerte, no quiso llorar mientras despedía a Jungkook en el aeropuerto, pero el sentimiento de dejarlo, aunque fuese temporal, era simplemente asesino.