Mi jefe omega 🐺

19🐺

La pareja salía del teatro tomados de la mano, el Omega sonreía en grande y el alfa lo apreciaba orgulloso.

-¿Cómo sabías?-se atrevió a preguntar kyungsoo.-¿Cómo sabías que esto iba a encantarme? -el pelinegro  no dejaba de sonreír, el show había sido genial.

-Baek me contó que te gustaba cantar -se encogió de hombros. -Pase por aquí cuando salí a hacer las compras y vi la cartelera, pensé que sería buena idea.

-Si que lo fue-miró la flor en su mano libre. -Y esto también es un lindo detalle.-olió el crisantemo naranja intenso.-Es muy peculiar y bonita.

-Significa "Ningún amor será comparable al nuestro"- Kyungsoo sonrió aún más.-¿Crees en el destino, Do kyungsoo?

-En estos momentos no estoy seguro. -el omega se acercó a su alfa y dejó en beso en su mejilla. -Me encantó-caturreó emocionado.–Cuando era joven solía cantar en un coro.

-Sigues siendo joven-contestó el alfa mientras tiraba de su mano para tenerlo más cerca. -¿Por qué ahora no eres un famoso cantante?

-Alguien debía ocuparse por el emprendimiento familiar- kyungsoo soltó la mano de su novio para abrazarlo por la cintura.

-No entiendo ¿Eso que tiene que ver? Podrían haber contratado a alguien más para que lo hiciera- Jongin posó su brazo sobre los hombros del peli negro.

-No es tan simple, papá tomó el control a mi edad. Lo justo es que yo me encargara de hacer crecer el negocio cuando Chanyeol mostró su talento por la música .

-Te sacrificaste, la mayoría de los empresarios son alfas.

-Exactamente, no se si podría tomarse como sacrificio - kyungsoo observó el crisantemo en su mano. –Queria demostrar y desafiar a mi madre, los omegas somos capaces de construir imperios.

-Eso lo tengo demasiado en claro, sosie.

-Preferí estudiar finanzas y administración cuando mi hermano estudio musica en el exterior.-el omega fue consciente de que estaban cerca del edificio. Su vista fue a parar al perfil del alfa. -Me gusta lo que hago, gracias a ello estás aquí.

-En realidad-contestó el alfa mientras sonreía mirando hacia adelante. –Estoy aquí porque el destino así lo quiso.

-Nosotros construimos nuestro propio destino, señor Kim.

-Entonces joven Do, construyamos nuestro destino juntos.

-Me encantaría, señor Kim -el peli negro empezó a jugar con la flor en sus dedos. –Por cierto, te tengo una sorpresa-habló captando la completa atención de su pareja. -Está en el apartamento.

-Estas haciendo que me ponga ansioso, yagi.-dejó un besito en su frente. -¿Que es?

-Lo verás cuando lleguemos.

Ambos se miraron, eran cómplices de la emoción. Se tomaron de la mano y empezaron a correr las pocas calles que faltaban para llegar al edificio. Las risas, la respiración alterada de ambos y la felicidad llenó el mundo de ambos, su mundo a parte. No importó que la noche estuviera fresca o las personas en las calles los miraran enternecidos o molestos, cada uno estaba sumido en el otro.

Una vez en la puerta del edificio, ambos caminaron apresuradamente hasta el ascensor. Una vez que ingresaron en el pequeño compartimento, el alfa ni siquiera lo pensó cuando acorraló a su pareja contra la pared para devorar su boca en un ardiente beso. Ambos respiraban irregularmente por haber corrido y sus corazones iban acelerados, ahora las razones de que no pudieran devolver la estabilidad a sus respiraciones y corazones era otra. Kyungsoo se sujetó de los hombros del alfa mientras este se encargaba de acariciar sus muslos y cinturas. Cuando el ascensor llegó a su piso salieron como pudieron entre besos y risas, no les importó casi caerse a medio pasillo o hacer ruido, estaban enfrascados en ellos mismos.