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Huir.

A Hanagaki Takemichi se le daba bien huir.

Cuando se enfrentó a Kiyomasa y se ganó el respeto de Mikey y Draken, cuando entró a Touman y se peleo con varios delincuentes que lo dejaron agonizando en el piso él sinceramente había creído que el Takemichi cobarde ya no existía.
Había comenzado a ser respetado dentro de Touman, al superar sus miedos, al aprender a no rendirse a pesar de lo débil que es se ganó el aprecio y respeto del invencible Mikey por lo que pensó que habia cambiado y ahora era un hombre valiente que no huía de nada ni de nadie.

Se convirtió en el comandante del primer escuadrón y ascendió a administrador de la naciente Touman. La Touman consumida por el crimen. Tenía un buen puesto a tan solo catorce años pero no podía ignorar el nuevo panorama de Touman. Muerte, corrupción, drogas, asesinatos, prostitución. Esta era la nueva era de delincuentes, la era de destrucción y sangre por donde quiera que vayas y Takemichi estaba asustado ante lo que estaba viendo. Draken, Mitsuya, Pa, Chifuyu todos ellos son demasiados leales a Mikey por lo que jamás cuestionarían el camino por el que Mikey está llevandolos, porque no podía seguir en esta Touman que no reconocía, aun si le tocaba caminar en un camino incierto y solitario prefería eso a que seguir siendo participe de esta Touman destartalada.

Huir de Touman que se había convertido en su familia fue doloroso y demasiado díficil. Mikey no le permitió abandonar el grupo a pesar de que Draken y Mitsuya intercedieron por él asi que no tuvo de otra que huir como una rata, esconderse entre los basureros para que Mikey no lo arrastrará de nuevo a su infierno. Se fue de Tokyo por un tiempo, descanso en Okinawa como un adolescente normal yendo a la escuela todos los días sin involucrarse en peleas nuevamente, se pintó el pelo de negro y comenzó a vivir solo.

Takemicchi sonrió con nostalgia cuando bajó del tren, afirmó el agarre sobre la mochila que tenía en su espalda y salió de la estación. Tokyo era tal como la recordaba lleno de gente y bullicio, los letreros, las luces led, las calles todo estaba como en sus memorias. Así que caminando tranquilamente por las calles de la capital nipona sonrió, mirando todo alrededor como si fuera un turista, con ventiseis años cumplidos Hanagaki Takemichi volvía a su hogar.

Por suerte, consiguió rentar una pequeña y barata habitación para quedarse a vivir ahora que ya había pasado mucho tiempo y consiguió un empleo en una tienda de discos. Su vida estaba lejos de ser su vida soñada pero vivía en paz, tranquilo, sin preocupaciones y libre, no podía pedir más.

Un poco cansado decide prender la Tv para ver alguna película o un drama cuando las noticias aparecieron en la pantalla, por un momento quiso apagar el aparato pero al final decidió ver que nuevas noticias sacuden la sociedad de hoy en día y quedó atónito en cuanto comenzo a escuchar atentamente.

" Varios miembros de la ToKyo Gang han sido hallados asesinados"

- N..no puede ser.

Sus manos cubrieron su boca en cuanto los nombres junto a las fotos de sus amigos aparecieron dejándolo profundamente asustado y dolido.

- D..draken-kun, Mitsuya- kun, Pa, Hakkai...Todos están... ¿muertos? - lágrimas corrieron por su rostro sin control, negándose a creer algo tan cruel - T..Tengo que llamar...a Chifuyu.

Inmediatamente agarró su celular y marcó el número, cuando habló con Chifuyu una semana atrás el nunca le comentó que había un conflicto interno en Touman por lo que tenía una esperanza de que todo fuera mentira, ellos no podían estar muertos, no podían..

- ¿Takemicchi? - El pelinegro dejo de respirar en cuanto escuchó aquella voz, sus ojos se llenaron de nostalgia y dolor y se desparramaron por su rostro - ¿P..por qué...llamas..ahora?

La voz de chifuyu era extraña, sonaba entrecortada, respiraba rápido y pesado.

- ¿Te encuentras bien?

- Estoy bien, solo andaba corriendo Jajaja - hizo una pausa - Viste las noticias ¿cierto?

- Dime que no es cierto, por favor - su voz tembló - Esto es imposible... Mikey jamás les haría daño a ninguno de ustedes..él no pudo haber matado a Draken..

- Mikey cambio, Takemichi. Ya no es el Mikey que una vez conociste - El pelinegro apretó los labios, su corazón rompiéndose - Kisaki e Izana lo cambiaron...debes huir o Mikey..

- Chifuyu, me estás dando muchos problemas. ¡Oh! Estas llamando a la policía.

El cuerpo de Takemichi se estremeció en cuanto la tercera voz entrando en discusión le inundó los oídos. Escuchó una maldición del otro lado de la línea y la familiar voz del líder de Touman.

- Entonces supongo que no tenemos mucho tiempo.

Takemichi se desespero.

- Me tengo que ir. Fue bueno conocerte mi amigo, oír tu voz por última vez fue lo mejor que pudo pasarme.

- ¡Chifuyu! ¡¿que está pasando?! ¡CHIFUYU! ¡CHIFUYU!

¡bang!

El sonido estridente de la detonación de un arma le arrebató el aliento.

Takemichi comenzó a llorar aun con el celular agarrado fuertemente y presionando contra su oreja, se oían pasos pero no podía pensar en eso ahora. Chifuyu, Mikey, el disparo, Draken, Mitsuya, Hakkai ¿por qué?

¿que ocurrió en doce años para que todo se fuera a la mierda?

-¿Takemitchy eres tú? - sus sollozos se le atoraron en la garganta incluso dejo de respirar, todo su cuerpo tembló con miedo - ¿de verdad eres tú? Takemichi di algo por favor.

No hubo respuesta.

- Te extrañé mucho, mi héroe llorón. Demasiado que no te lo puedes imaginar - Takemichi se cubrió la boca con su mano evitando siquiera emitir algun sonido - Quiero verte ¿donde estás? Estás en tokyo ¿cuando volviste? Chifuyu nunca me dijo nada de ti.

El pelinegro continuó sin responder.

- Takemichi esta vez te mantendré a mi lado.

Los ojos de Takemichi se abrieron, el miedo le burbujeo en cada parte de su cuerpo, sus piernas temblaron por lo que tuvo que sostenerse de uno de los muebles para mantenerse en pie.

¿Sería el próximo en morir?

- Ya no existe nadie que me impida estar contigo. Así que espera por mí. - su respiración se descontrolo, la cabeza comenzó a darle vueltas - Te encontraré, Takemitchy.

Y la llamada finalizó.

El cuerpo de Takemichi cedió y sus rodillas impactaron en el suelo de madera, incontables lágrimas inundaron su rostro bajando por sus mejillas y temblaba, temblaba de miedo, su corazón dolía, todo en el daba vueltas porque no entendía nada de lo que estaba pasando.

Mikey cambió. Todos murieron y ahora es su nuevo objetivo.

Su líder se corrompió y eliminó todo lo que le importaba.

Todo terminaría para él ahora.

Iba a morir a manos de la persona a la que una vez quiso como a nadie.

Moriría.

A manos de Sano Manjiro.

Un terrible futuro || Mikey x Takemichi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora