"Soy un vampiro de emociones primarias."
- Albert Espinosa
---------
00:07
¿Que si tengo miedo? No. Ni siquiera por el hecho de que papá puede volverse loco con esto.
Papá, papá, papá... Estoy harta de papá.
Sigo a estos dos chicos que están a mi lado sin dudarlo porque quiero y porque claramente no me importan las consecuencias de ello, no entiendo la sobreprotección de papá si algún día me tengo que largar de su lado y cuando lo haga juro que jamás volveré.
Caminamos hasta llegar a una zona arbolada, está un poco lejos de los edificios y casas, pero no debo actuar paranoica cuando es muy común encontrarse con lugares un poco más aislados de la ciudad. Los chicos siguen un camino sin asfalto que culmina en una cabaña. Hay una piscina a mi izquierda llena de agua cristalina y con dos tumbonas de madera al lado, y más al lado un jacuzzi. Al frente de la cabaña hay un suelo de madera donde están una mesa con una sombrilla y varias sillas, también hay un fogón a mi derecha y cuatro bancos de madera en cuadros circundantes con una distancia de dos metros entre sí, y por último unas luces cálidas emanan de unas bombillas postradas a ambos costados de la cabaña. La vivienda es un poco grande y de dos plantas, tiene ventanales de cristal por delante que resaltan un poco como es por dentro. Parece ser un lugar tranquilo pero los detalles hacen que luzca moderna y la madera parece ser de guayacán y granadillo, caras y difícil de conseguir. Lo sé porque ciertos elementos de mi casa están hechos de ellas.
Luar es el primero en entrar a la vivienda y luego de Brent entro yo, quedando perpleja porque es mucho más linda por dentro: hay más bombillas de color anaranjado, no sé si es la calefacción, pero por dentro está más cálido y desde que atravieso la puerta un olor a lavanda penetra mis fosas nasales, luego me percato de que el agradable olor proviene de algunas pocas velas que aportan más calor a la cabaña. Hay varias divisiones abajo, y entre la cocina y el cuarto de estar se encuentra una escalera que Luar sube. Brent se encamina a la cocina y yo me quedo postrada allí en la sala sin saber adónde ir, después de todo estoy en territorio ajeno.
-¡¿Cerveza?! -Brent grita desde la cocina y supongo que se dirige a mí. Me adentro a la cocina para verlo inclinado buscando algo en la nevera. Abre la boca para gritar de nuevo, pero la cierra cuando voltea la cabeza y su mirada se encuentra con la mía-. Oh, no te sentí -sonríe.
-Lo siento -me disculpo agachando la cabeza-. ¿Hablabas conmigo?
-Así es. ¿Quieres una cerveza? -Niego con la cabeza-. ¿Coca-Cola? -Vuelvo a negar-. ¿Agua? -dice sarcásticamente y ríe, yo lo observo con los ojos entrecerrados.
-¿Tienes algún energizante? -Alzo ambas cejas y cruzo los brazos.
-Solo... -rebusca-. Solo tengo Monster Energy, ¿qué sabor quieres?
ESTÁS LEYENDO
LUAR - Trilogía Granate I
VampireSolo quería un tatuaje para vengarse de su padre, pero Keyla nunca pensó que algo tan irrelevante iba a ser su portal hacia el conocimiento de una raza completamente distinta a la humana y el inicio a un delirio latente en su mente. Sus días se resu...