Te Necesito

Capítulo 28: La despedida.

Toca la puerta y esta se abre lentamente. Sabe que la chica ha de haber usado su poderes para hacerlo. Entra con temor, como cuando iba a ver a su madre después de haber hecho alguna travesura o haberle pegado a Thor... O apuñalado.

Camina lentamente y finalmente la ve. Está parada frente al gran espejo, con su vestido de bodas. La tela plateada y brillante, dejando sus hombros descubiertos y tan ceñida a su cuerpo, hacen que lo rasgos infantiles que aún poseía Atla debido a su edad, desaparezcan por completo. La cola cae al piso de un forma elegante...

No puede evitar que su corazón se acelere y deje divagar su imaginación, pensando en qué diferente sería todo si él fuera el hombre con el cual se desposaría Atla. Se peinaría y vestiría un elegante traje verde mientras la espera en el altar. Stark la llevaría de un brazo y tal vez estaría con un rostro serio, ya que no estaría totalmente de acuerdo con la boda, pero nada importaría. Toda esa imagen desaparecen al momento que Atla gira el rostro y Loki finalmente ve sus ojos hinchados y rojos.

La chica lo mira seriamente y comienza a caminar hasta él. Loki no puede moverse y observa como la chica para en seco a tan solo un metro de distancia. Ambos se miran en silencio, sin saber qué hacer, cómo reaccionar...

- Loki...- La voz de Atla llega en un susurro a los oídos del Dios.
- Atla.

Ambos dejan el nerviosismo que sentían minutos atrás y se abrazan. El la coge por la cintura y deja que ella envuelva su cuello con sus brazos, apoyando su cabeza en su hombro y él la imita. Siente su traje mojarse poco a poco por la lágrimas de la chica y lo contagia. Es un abrazo lleno de sentimientos, lleno de angustia, triteza y desesperación

Ambos se separan lentamente y sin soltar sus manos, caminan en dirección a la cama de la chica. Loki no lo soporta más y antes de llegar a ella, coge su rostro y comienza a besar cada lágrima que cae hasta llegar a su boca.

Atla se siente renacer al sentir los labios de Loki en ella. Las manos de Loki recorren con desesperación el cuerpo de la chica, mientras ella se limite a posar sus manos en el pecho de él.

- Loki, Yo...- La voz de Atla se entrecorta al hablar.
- Shhh... No digas nada.- Pega su frente en la de la chica y sin dejar de coger su rostro y cerrando los ojos, sigue hablando.- No puedo soportar verte en ese vestido y saber que no lo usarás para estar a mi lado. No puedo soportar la idea de que yo no seré el que te lo quite...

Atla observa como las lágrimas de Loki caen lentamente por su rostro y siente el alma hecho pedazos ante sus palabras. Si las cosas hubiesen sido distintas, tal vez, en un futuro lejano, esta sería la noche más feliz de su vida. Pega sus labios una vez más en los de él y nota la pasión crecer entre ambos.

- Quítamelo.- Suplica.

Loki dibuja una sonrisa triste en su rostro. Acerca sus labios al cuello de la chica y comienza a succionar su blanca piel, mientras sus manos buscan con cierta desesperación la cremallera del vestido. Lo encuentra y tras unos segundos más, el vestido cae, dejando a Atla solo con su ropa interior de color blanco. Loki la observa ensimismado y comienza a bajar por todo su cuerpo, besando cada parte que puede hasta llegar a sus muslos. Atla acaricia su cabeza y lo peina con lo dedos mientras cierra lo ojos.

Siente como Loki la empuja levemente hasta caer en la cama y se coloca encima de ella sin dejar de esparciar besos por todo su cuerpo. Coge una de sus piernas y baja hasta ella para llenar de besos cada parte que puede. Finalmente siente las manos de Loki en sus caderas y se deshace de su ropa interior. Atla se incorpora,usando sus brazos como apoyo y comienza a desnudar al Dios del Engaño.

Ambos sueltan lágrimas y es que saben que tal vez será la última vez que se vean, la última vez que se toquen, la última vez que pueda sentir el uno de otro.