CAMILA CABELLO
Una pequeña sonrisa surgió en mi rostro. Pronto Dinah estaría aquí conmigo y podría intentar entender mejor la situación en la que estoy. Suelto un largo suspiro. Con aquella misma incomodidad presente en mi pecho, las palabras de Lauren resuenan otra vez en mi mente. Mi rostro aún está marcado por las lágrimas, siento las manchas que causaron en mi piel. Un recuerdo de cuan complicado está siendo todo esto.
No es fácil para nadie, pero está siendo peor para mí. ¿Nadie se pone en mi lugar? Simplemente desperté un día, y en lugar de ir a la escuela como una adolescente normal, descubrí que estoy casada y tengo un hijo. Me olvide de dieciséis largos años. ¿Cómo podría acostumbrarme a eso instantáneamente?
No soy egoísta, sólo estoy confundida. Es injusta la forma en que todos parecen estar obligándome a hacer algo. No tengo la culpa si no recuerdo nada, ¿cierto? Nadie me puede juzgar por no saber lidiar con todo esto. Ni los mismos médicos consiguieron explicar lo que está sucediendo.
Me levanto del sofá, con los pensamientos frenéticos. Necesito organizar mi mente, pero en este momento, mi necesidad mayor es tomar un baño antes de que mi mejor amiga llegue. Mientras subo las escaleras, escucho mis propios pasos resonando por las paredes extremadamente blancas –además de toda la decoración blanca. ¿Tenemos un fetiche por ese color? Y todo el silencio en este lugar me incomoda mucho. Lauren no comentó sobre algún empleo y ni me dejo algún recordatorio.
¿Paso mis días en casa sin hacer nada y soy mantenida por Lauren? No me consigo ver en esa posición. Siempre desee crecer y tener mi independencia, no importaba si estuviera casada o no.
El baño fue relajante, el agua estaba genial y me ayudo a estar un poco más tranquila. Después de terminarla, salí del baño y fui en dirección al closet. No sabía si las ropas que tome en algunas gavetas eran mías, pero me gustaría que lo fueran. Principalmente las intimas, no es higiénico compartir bragas con otra persona. Cuando estuve debidamente vestida, volví al baño a colocar mi toalla al lado de otra que estaba colgando en el baño. Sabía que era mía, pues tenía "C.J" bordado.
Sólo podría ser "Camila Jauregui". Parece que la a otra yo realmente le gusta ostentar el apellido de Lauren. Eso es muy irreal para la actual yo.
Cuando me senté en el sofá, sólo entonces me di cuenta de cuan cómodo es. Ahora entiendo porque Louis y Lauren adoran estar acostados aquí. Sentada allí, intente de forma inexperta, forzar mi mente. Nada, no viene ni un mísero recuerdo de la menor cosa posible. Me sentí desolada, y sabía que pronto estaría llorando otra vez, pero el sonido del timbre me animo.
—¡Dinah! —Me levanté del sofá y corrí en dirección a la puerta. Estaba ansiosa por verla. Tenía una enorme sonrisa en mi rostro cuando giré la manija, pero abrí la boca incrédula al encontrarme con ella. —¡Joder!
Ella siempre tuvo un cuerpo fenomenal, pero parece que los años le hicieron muy bien. Sin contar en su rostro las facciones de mujer. Una belleza única que siempre fue solamente de ella.
—Mira eso, parece que alguien volvió a decir palabrotas. —Ella bromeo y soltó una risa. Estaba muy sorprendida para tener alguna otra reacción además de estar paralizada. Dinah tenía un bello cuerpo cuando aún éramos adolescentes, pero viéndola ahora, ella se había convertido en una mujer fenomenal. —¿Qué mirada es esa? ¿Necesito recordarte que no vamos a tener sexo otra vez?
—Tú estás... ¡¿Cómo que otra vez?!
Grité completamente incrédula. Rápidamente deje de mirar su bello cuerpo y fije mi mirada en su rostro. Ella tenía su típica cara de aburrimiento, y no podía creer que habíamos hecho eso alguna vez en esta vida.
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Stupid Wife (REMAKE) (Traducción)
אקראי¿Te has imaginado casada con alguien que nunca soportaste en la vida? Camila también nunca lo había imaginado, sino todo lo contrario. Se suponía que iba a ser solo una mañana normal, Camila despertaría, tomaría el desayuno con su familia, e iría a...