-EPÍLOGO- (corregido)

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Un año después, Hayden ya tenía dos años de edad. Celebramos la navidad en la mansión de mis padres. Layla se casó con Noah tres meses después de casarme con Ryan y tuvieron un hijo llamado Matt, tenía cuatro meses.

Me levanté para ir al baño, Hayden corrió hacia nuestra cama mientras Ryan estaba preparando el desayuno. Salí del baño después de hacer mis necesidades cuando me encontré a Ryan y a Hayden en la cama desayunando.

-¿No me esperáis?- les pregunté sonriendo.

-No.- dijeron los dos a la vez.

-Ah muy bien, pues ahora veréis.- dije.

Salté a la cama y empecé hacerle cosquillas a Hayden, Ryan sujetó la bandeja del desayuno para que no se cayera todo dentro de la cama. Los tres reímos, paré de hacerle cosquillas y le di una mordida a la tostada de Hayden . Después de desayunar nos preparamos para ir a casa de mis padres. Subí a Hayden al coche y le abroché el cinturón de la sillita de viaje.

-¿Preparado?- le pregunté a Hayden .

-Shiiii.- dijo Hayden eufórico.

-Pues que empiece el viaje.- le dije sonriendo. Ryan se acercó a mi preocupado.

-Cariño ¿te encuentras bien?- preguntó preocupado.

-Sí ¿por qué?- le dije.

-Estás pálida.- me contestó.

-Pues me encuentro bien.- le dije.

-¿Estás segura?- preguntó preocupado.

-Claro.- le dije acercándome a él y besándole en los labios.

Los dos subimos al coche e iniciamos el viaje. Una hora después llegamos a casa de mis padres, ellos se acercaron al coche sonriendo. Ryan bajó las maletas y mi padre le ayudó, ya que nos quedamos unos días con ellos. Hayden entró corriendo a la casa cuando le desabroché el cinturón. Mi madre se acercó a mí.

-¿Se lo has dicho a Ryan?- preguntó mi madre susurrando.

-Aún no pero sospecha algo.- le contesté susurrando.

-¿Cuándo se lo dirás?- preguntó mi madre.

-No lo sé.- le contesté. Entramos a la casa, yo estaba mareada y tenía náuseas, subí a acostarme un rato. Ryan me siguió enfadado hasta la habitación.

-Kate, te llevo al hospital, no es normal, llevas días con náuseas y mareos.- dijo Ryan enfadado y preocupado.

-Estas náuseas y mareos tardarán en irse.- le dije acostándome a la cama.

-¿Cómo estás tan segura?- preguntó Ryan confuso.

-Porqué estoy embarazada.- le contesté.

-¿Qué?- preguntó confuso.

-Sí, lo supe ayer.- le dije.

-¿Y porqué no me lo dijiste ayer?- preguntó Ryan.

-Porqué cuando llegamos a casa nos encargamos de Hayden y de la casa.- le contesté.

-Embarazada.- susurró Ryan mentalizándose. -Embarazada, es el mejor día de mi vida.- dijo feliz.

Ryan se acercó a la cama y me abrazó, me besó con emoción, nos quedamos un rato acostados en la cama y me quedé dormida. Me desperté porque tenía hambre, baje a la cocina, Ryan y Hayden estaban haciendo galletas.

-¿Mmmmhh, qué bien huele!- dije olfateando.

-Es para Santa Claus.- dijo Ryan.

-Shi.- dijo Hayden .

-La cena estará en cinco minutos.- dijo Ryan.

-Vale.- contesté. Volví a la habitación y me puse la insulina y comimos los cinco juntos.

Llegó la hora de la cena y llegaron los invitados, Layla y Noah entraron con el bebé en brazos. Hayden se acercó a ellos emocionado.

-Att.- dijo Hayden eufórico refiriéndose a Matt.

-Cariño no grites que despertarás a Matt.- dije.

Fuimos al salón dónde estaban el resto de invitados. Cenamos en el comedor y a la hora de entregar los regalos, Ryan y yo anunciamos mi embarazo. Mark y Michelle se prometieron. Ocho meses después di a luz a una niña a la que llamamos Mía.
















~FIN~


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(Aquí termina la historia totalmente corregida, las fotos las encontraréis en mi página de Facebook y mi perfil de Instagram.)

AMOR DULCE (CORRIGIDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora