Perla

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"¿Está dormido?" -Un ligero bufido fue lo que sonó después, y Mu Qing parpadeó ligeramente mientras intentaba acostumbrarse a la luz-. "¿Quien eres?"

"Fu Yao" -Respondió de golpe, aquel nombre lo usaba cuando viajaba por el océano y no quería ser reconocido-.

"¿Estás bien? Estás semi desnudo en medio de una zona de oleaje alto"

"Naufrague hasta acá" -Dijo mientras se sentaba, y veía a los dos hombres frente a él, uno que le veía con el ceño fruncido, y el otro con sincera curiosidad-. "¿Quiénes son?"

"La guardia real, mi nombre es Wei Wuxian, y él es mi hermano Jiang Cheng"

"Le estás dando demasiada información a un desconocido"

"¿Quieres callarte?" -El de los ojos grises le dijo a su hermano sonriendo apenado mientras el otro parecía más enojado, incluso rodó los ojos-. "¿Naufragaste? ¿De donde?"

"No lo recuerdo, choqué con esa piedra, es lo último que tengo" -Señaló fingiendo dolor de cabeza, mientras se llevaba ambas manos a esta, Jiang Cheng gruñó mientras se retiraba la túnica superior de las tres que usaba, y le lanzó después la segunda al platinado-.

"No puedo seguir viéndolo desnudo, y por tu mirada, vas a querer llevarlo con nosotros"

"Al menos hasta que recupere la memoria" -Wei Wuxian se puso de pie, y extendió su mano hacia él, entre sorprendido, la tomó y se levantó, aún sin poderse mantener del todo estable, incluso sujetó uno de los brazos del pelinegro, Wei Wuxian divertido, miró a su hermano-. "Hasta olvidó como caminar, Jiang Cheng"

"Solo veníamos por ostras" -El ojivioleta habló bajo mientras le daba la espalda a ambos y comenzaba a caminar-.

Mu Qing se estabilizó como pudo, y comenzó a caminar con cierto trabajo en un inicio, mientras admiraba el lugar, no podía negarse a la ayuda, menos aún porque ni siquiera sabía donde estaba, los mortales tenían reglas y lugares más aburridos que en el océano.

"¿Fu Yao?" -Tuvo que volver de sus pensamientos cuando el de los ojos grises le llamó-. "Te llevaremos al palacio, y te conseguiré algo de ropa, ¿Qué edad tienes?"

"Diecisiete" -Los dos mayores se miraron entre sí, era obvio que se veía joven, pero no esperaban que tanto, aún era un menor-.

Los tres caminaron en silencio de regreso al palacio, y en la entrada, un sujeto de ojos dorados miró completamente serio a ambos, Wei Wuxian asintió hacia Jiang Cheng, y este tomó el brazo del platinado, llevándolo con él, mientras Wei Wuxian parecía distraer al guardia con una enorme sonrisa en el rostro.

"¿Los estoy metiendo en problemas por estar aquí?" -Mu Qing preguntó con una ceja ligeramente elevada, y Jiang Cheng negó, aunque no respondió, y en cuanto llegaron a una habitación y cerraron esta, el ojivioleta volvió a suspirar-.

"Vas a ducharte, apestas a pescado y no ensuciarás mi cama" -El platinado se olfateo y arrugó la nariz mientras asentía-. "Espera aquí niño" -No es como si Mu Qing tuviera muchas opciones de escape, así que asintió, y vio salir al pelinegro-.

Fue cuando decidió soltar su cabello, el platinado cabello que brillaba con naturalidad y hacía verlo más etéreo. Se retiró la túnica que el mayor le había dado, quedando solo con la camisa que Jun Wu le dio antes de irse,y como si la suerte le tuviera algo planeado, la puerta se abrió de golpe, Mu Qing le daba la espalda, creyendo que era Jiang Cheng.

"¿Quién eres?" -Pero el ligero timbre más grueso de voz, junto a la agitada respiración, lo hizo girarse rápidamente, y se encontró con otro pelinegro, de tez más morena, y con rasgos perfectamente delineados, que frunció el ceño al verle-.

Redbone (𝐅𝐞𝐧𝐠𝐪𝐢𝐧𝐠)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora