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  Ya habían pasado dos días desde que Mei conoció donde se hospedan sus amigos. Desde entonces ella no volvió más allí, después de marcharse. Sus estudios iban bien y también estaba mejorando su fuerza física, entrenando después y antes de estar en la U.A.
  Era un día normal, nevado y muy frío, y Mei debía ir a la academia. En camino a ella, se encontró con quien menos se queria encontrar; Bakugo, porque un día antes le había propuesto de que si el duraba al menos un día entero sin protestar ese mismo día iban a tener un encuentro.
  《¿No será qué?...No, no quiero pelear ahora, tengo todas las partes de mi cuerpo cansadas, este tipo quiere pelear solo porque le pegue e hice un agujero debajo de el》. Supuso ella.
     — Bien — Su amigo Kirishima suspiró—. El gano, le debes una pelea, Mei-sama— Pidió  el.
     — Vamos, extra. Te vi entrenando esta mañana, veamos cuanto haz mejorado, ¿Eh? — Katsuki se aproximó a ella teniendo una mano estirada hacia ella, de la que saltaban chispas.
  Le dio a Mei en los brazos que la cubrieron, su ataque fue rápido y solo pudo cubrirse.
     — No, bakugo. No aquí. Estoy cansada y no te gustaría pelear con alguien en estado débil, ¿Verdad? Soy un buen oponente que puedes aprovechar después. En la salida te veo, no ahora.
  Mei saco sus brazos de encima y se saco el polvo de encima. Lo que ella estaba haciendo es manipularlo.
     — Tu también eres fuerte y no creo poder contigo ahora.
  Bakugo sonrió y se señaló con el pulgar.
     — Al fin alguien me reconoce. parece que no eres tan tonta, extra. — Bajo su mano y le hizo una señal a Kirishima de que se vayan.
  Las clases fueron normales, Shoto y Momo cada vez se amigaban más, lo que hacia que Mei quede completamente sola esperando a que alguien le hablará, aunque en realidad estaba mejor sin acompañantes.
  A la salida pudo ver cómo un rubio se acercaban a ella; Monoma, el chico qué odiaba a la clase 1-A.
     — Escuche que un rubio por ahí decir ibas a pelear con ese mismo rubio ahora. Buena suerte, fenomeno de la clase 1-A.— Cuando Monoma se acercó a ella siguió de largo, al parecer no venía a buscarla a ella.
  Luego de el llegó Bakugo y Kirishima. Bakugo se quedó quieto cuando la vio. Enseguida preparo su ataque. Mei solo estaba tenía una mano libre, la ocupada sosteniendo su mochila y la libre ya tomando la fuerza del viento en su puño. Su enemigo corrió hacia ella imprudentemente dándose impulso con una explosión bastante grande detrás de el, el humo de ella tapaba las ventanas de la academia.
     — ¡AHORA SI! ¡MUERE! — Exclamó. Llego hasta la presencia de Mei y rozo la mano que tenía preparada.
  Un humo bloqueo la vista de ambos, y de algunos alumnos que se preguntaban que sucedía. Mei estaba a una larga distancia, pero estaba completamente bien, la bomba de el no la habia afectado.
     — Para que lo sepas, llevo acumulando fuerza en mi puño desde hace bastante, cuando te estabas acercando a mi, tome un poco de impulso ya que si lo hacía con más impulso terminaría muerto, pero el que tome bastó. Chocó mi puño contra tu mano, así tu explosión se combinó con el efecto de mi ataque y hasta los árboles se sacudieron.
     — Pero tu efecto se combinó con mi explosión, ¡50% tuyo y 50% mio! — Volvió a atacar despiadadamente con su quirk pero aún más fuerte, eso Mei tuvo que esquivarlo.
     — ¿Cuándo terminará esto? ¿Debes dejarme muerta o me debo rendir?
     — ¡NO ME IMPORTA!, ¡CON TAL DE QUE APRENDAS QUE ERES UNA DEBILUCHA ESTÁ BIEN!
  De nuevo explotó su mano, pero esta vez en su rostro, lanzando a Mei lejos. Ella toco su cara aliviando el dolor, se puso de pie y lo miró algo desafiante. Volvió a tomar fuerza en una mano pero con la otra sacaba fuerza tocando la tierra. Tenía la mano derecha alzada en el aire y la izquierda recogiendo el poder de la tierra, en esa mano se formaba un brillo de color marrón. Acomodó sus manos cuando vio que otra vez él la atacaba, rápidamente corrió hacia él con las manos apuntó de golpearle el rostro. Katsuki le explotó la mano que Mei tenía para atacarlo, o sea la derecha, y con la izquierda intentó golpear el abdomen de este, pero Bakugo la detuvo. Aún así su mano izquierda impactó con la de Bakugo e hizo su trabajo; lo lanzó por los aires. Aterrizó junto a su amigo Kirishima que los observaba confundido y a la vez sorprendido, lo mismo hacían los estudiantes, sólo los miraban.
     — Ahora si. Me rindo — Dijo Mei, poso sus manos en sus caderas y río un poco—. No iba a perder pensando que yo era una debilucha, en realidad tienes más poder, pero me subestimaste y lo pagaste bien.
  Bakugo se enojo a un más y empezo a gritarle insultos mientras se movía de un lado a otro, y su compañera Mei se alejaba tranquilamente.
  Volvió a su casa, Mei se acomodó más en ella hasta quedar libre y tomó las pastillas que la dejaban permanecer de pie. Realmente esas eran una molestia, pero no podía evitarlas.
     — Me and my husband...We... ¿will be in better? — Pronunciaba ella al ritmo de la cancion que cantaba— ¿And im the idiot?...
  Ella se rió levemente.
  Ahora tendría que salir a entrenar, daría 20 vueltas a su parque más cercano sin descanso hasta completarlas.
  Salió de su casa y se dirigió al parque que más cerca tenía, allí comenzó a entrenar.
  Regreso, cuando completo sus 20 vueltas, y al llegar a su casa en lo único que pensó fue golpear varias veces el saco de boxeo que tenía en su sótano. Se desplazó hasta el y cuando tuvo la puerta que le abría paso al sótano en frente intento abrirla, pero esta no lo hizo. Mei volvió a intentar, y sucedió lo mismo. Sacudió el picaporte, irritada. Fue allí donde la manija fue arrancada de la puerta, a Mei se le puso la cara fastidiada.
     — Que fastidio. No voy a gastar fuerza — Le dijo a la mismísima puerta, cruzada de brazos.
  Miro a la puerta destruida de reojo y luego suspiró. Desenredo sus brazos e hizo un movimiento brusco de golpear la pared, tirando a esta al piso.
      — De todos modos se iba a romper — Entro al sótano. No tenía ninguna lámpara, ni foco ni vela. El recinto estaba completamente oscuro y sucio.
  Mei buscó algo con que iluminar el lugar, encontró una lámpara llena de polvo a la que poco segundos después Mei encendió, y pudo ver con más claridad el lugar; en una esquina, en el medio, había un mueble lleno de trofeos, donde estaba apoyada la lámpara había una mesita también sin nada más que la lámpara, y después vio al saco colgado a un costado. Mei se acercó a él. Su puño empezo a acumular aire, la luz que rodeaba el puño también iluminaba bastante el lugar.
     — Estás un poco sucio — Dijo—, se te saldrá.
  Estaba apuntó a golpear el saco, pero de repente oyó un golpe en la puerta de arriba.
  La luz se desvaneció, Mei subió los escalones. Abrió la puerta a la que llamaron y ahí estaba Todoroki con un paquete pequeño en las manos.
     — Hola — Mei fruncio el ceño—. ¿Por qué estás tan violenta estos días? — Preguntó el muchacho.
     — ¿Violenta? No se de que hablas.
  Shoto se tornó más serio de lo que estaba antes, bajó sus manos de su pecho.
     — Le dibujaste bigotes a Denki y tiraste a Mineta por la ventana, incluso te metiste los audífonos de Jirou en la boca y los mordiste — Mei ahora estaba cruzada de brazos.
     — Lo de Denki fue venganza, el otro día había robado una pulsera mia y estuvo oliendola todo el día. Mineta tomo una foto debajo de mi falda. Y lo de Jirou, bueno, dijo que tenía picazon en ellos — Dijo Mei—. Si vas a venir a molestarme, mejor vete porque estoy ocupada. O no, ¿Sabes qué? Me gustaría darte una buena paliza ahora mismo, porque nosotros estuvimos amigados como 40 días para que despues te quedes con la...Momo y que no me hables por 10 días — El la miraba con impresión y tristeza, había vuelto a traer el paquete a su pecho—, Si tu intención era venir a hacer que te odie más, pues felicidades, no se para que trajiste ese paquete de regalo si viniste a decirme que estoy violenta.
  Mei saco un brazo que estaba cruzado con el otro y golpeó la caja que tenía Shoto. Ahora estaba tirada sobre la nieve, el paquete arruinado y su amigo humillado.
  Ella retrocedió un poco hasta estar detrás de la puerta y la cerró en la cara de Todoroki.

𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢𝐨́𝐧 [𝐓𝐨𝐝𝐨𝐫𝐨𝐤𝐢 x 𝐓𝐮]    Donde viven las historias. Descúbrelo ahora