18: Danza

2K 298 23
                                        


xSouh

Jaula: Kago no Tori no Juin

18: Danza

―Tanto que luché por conseguirte ese día en el bosque de la muerte, Sasuke-kun. ―siguió hablando el Sannin, curveando la parte inferior de su cuerpo para avanzar, la visión de una serpiente mitad hombre era inquietante, alzándose sobre su cola dándole una altura ventajosa. ―Tienes que aceptar que no me equivoqué cuando dije que vendrías a mí.

―No estamos aquí por ti. ―gruñó el Uchiha, sin despegar sus ojos rolos de los ámbar del hombre.

―¿No están en Otogakure por mi? ― preguntó con falso pesar, llevándose una mano al pecho como si realmente le dolieran las palabras, aun así no apartó su atención de los dos jóvenes en ningún momento. ―¿A quien más podrían buscar aquí?

―¿Te suena el nombre de Akatsuki? ―cuestionó Sakura, buscando en su mente todas las posibilidades que pudieran tener para salir de ese lugar en una pieza.

―¿Porqué buscarías a Akatsuki, Sakura-chan? ―quiso saber el Sannin ―¿Estas interesada en unirte?

La Haruno dio dos pasos atrás, poniendo distancia entre ella y el hombre que se seguía arrastrando poco a poco hacia ellos, sus ojos eran divertidos, llenos de un brillo morboso que le ponía la piel de gallina a los dos jounnin de Konoha.

―Jamás...

―Si tu quieres... Si ustedes quieren, ―se corrigió― yo podría llevarlos con Lider-sama. ―sonrió, dejando ver una lengua inhumanamente larga. ―Les daríamos una recibida digna de dos portadores de unos ojos como los suyos.

―Si eres un Akatsuki, ¿Por qué no vistes la capa? ―preguntó Sasuke, sacando de entre sus bolsillos ocultos un juego extra de kunai.

―¿Tu interés por Akatsuki es meramente académico, Sasuke-kun? ―susurró el sannin, humedeciéndose los labios mientras sus manos comenzaron a hacer múltiples sellos, poniendo a la defensiva a Sakura y Sasuke, pero no fue ningún jutsu que buscara lastimarlos, cuando el humo se disipó, la única diferencia era la capa negra con nubes rojas que ahora colgaba de sus hombros.

―Vamos a destruir a Akatsuki. ―gruñó Sakura, ajustándose los guantes de cuero que protegían sus nudillos, cansada de todo el cuento y respuestas evasivas del ninja desertor de Konoha.

―Sasori-kun seguro espera una revancha contra ti, Sakura-chan. ― rio abiertamente Orochimaru. ―Es incluso un poco molesto como compañero, siempre hablando sobre convertirte en una de sus marionetas, tus nuevos ojos son solo un plus para el repertorio.

―Eres un hij...

―No te alteres, por favor, Sakura-chan. ―pidió, deteniéndose para agrupar el resto de su viperino cuerpo, ganando varios centímetros más de altura. ―Si tu te unieras a nosotros, podrías dejar atrás esa jaula en la que te metieron los Hyuuga, tu eres un ave libre, con hermosas alas para volar donde tu quieras.

―Cállate. ―gruñó la pelirosa, lo único que la detenía de atacar era el brazo de Sasuke sobre su hombro, necesitaban que Orochimaru se descuidara más para crear un ataque efectivo. Un encuentro largo no les daría la ventaja, menos dentro de las fronteras de ese país.

―¿Y tú, Sasuke-kun? ―sonrió el sannin, pasando la lengua por sus labios de nuevo. ―¿Por qué quedarse en una aldea donde siempre serás la sombra de Itachi-kun? Konoha nunca querrá que seas superior a tu perfecto hermano con correa, pero yo... yo podría convertirte en algo que ellos ni siquiera se atreverían. Ni siquiera todo el chakra del kyuubi dentro de Naruto-kun será rival para ti.

Jaula (NejiSaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora