Capítulo 57. Divorcio?

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Días después...

- Quieren otro bebé? -- pregunta Carolina

- Si mamá -- lava los trastes -- Lo hablamos con los niños y ellos se pusieron contentos, los tres quieren otra niña -- ríe

- No te parece que ya es difícil con tres? -- dice Regina

- No, de echo no -- seca sus manos -- Tengo hijos muy buenos, ayudan aquí en casa, se portan bien en la escuela, si se pelean un poco pero al final están así -- señala a la sala donde los tres jugaban con Luís

- Y para qué quieren otro? -- indaga -- Los gemelos tienen 6 años, Helena está por cumplir cuatro años, las clases ya se vienen

- Ahora resulta que debo hacerles una mini presentación en power point para explicar las razones por las que queremos otro bebé -- comienza a cortar fruta -- Su función aquí y el plan?

- No, claro que no -- se mete Carolina -- Pero si es una decisión algo inesperada hija, de todos modos sabes que me pondría muy feliz saber que seré abuela de nuevo -- ríe

- Al final es en tu cuerpo que va a crecer -- agrega Regina -- Sólo quería saber el motivo real que se esconde detrás de esa decisión, no será por esos rumores de tu matrimonio?

- Cuántas veces lo voy a tener que repetir? José Luís y yo estamos bien -- les lleva los platitos con fruta a los niños y regresa -- Esos son chismes de la prensa amarillista

- Es que justo coincide -- da de hombros -- Nos dices que quieres un bebé justo cuando hace unos días salía una nota donde Luís y tú discutían en la calle

- Sabes que? Puedes creer lo que quieras -- sonríe -- Mi matrimonio va bien, no buscamos otro hijo para hacerlo más sólido porque eso no es realmente inteligente -- le entrega un plato con fruta -- Llevaselo a tu hijo ya volvió del baño -- señala

- Yo sólo dije lo que escuché -- se lo lleva





Camila e Isabela estaban en el comedor que era más femenino con las mariposas, ambas tenían tarea por realizar pero no iban a perderse la oportunidad de pasar tiempo con su tía tampoco, las dos tenían 12 años, ser adolescentes con sus padres era complicado ya que mucho no las entendían, salvo su tía Altagracia por esa razón les gustaba estar en su casa, se tomaron un descanso cuando ella entró con dos platos de fruta, era más o menos una regla comer al menos un poco luego del almuerzo, nadie se quejaba pues ya estaban acostumbrados a eso.





- Tía cuando planean que llegue el bebé? -- la abraza igual que Camila

- Vamos a esperar a que Helena vaya al kinder, que se adapte y ahí vemos -- revisa sus libros de matemáticas -- Entienden bien esto? O quieren algo de ayuda

- Entendemos -- ríe Cami -- Son ejercicios que ya nos explicaste la otra vez

- Tía por qué mi mamá dice que te vas a divorciar del tío Luís? -- pregunta Isa -- Ya no se aman más?

- Tu mami cree en puros chismes -- ríe -- Tu tío y yo seguimos igual de enamorados que antes -- sonríe -- Por eso queremos otro bebé, además es el último, cuatro es el número ideal para nosotros dos

- No creí lo que salió en la revista -- dice Cami -- Ustedes siempre se andan compartiendo baba -- hace una mueca de asco -- Mis papás ya ni se hablaban antes del divorcio

- Ustedes no tienen que preocuparse por lo que la gente de afuera dice -- acaricia sus cabezas -- Si nosotros no les confirmamos nada es porque no es real, está bien?

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