Tiempo, Mentiras y Melodías

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Alison

El silencio nos inundó en la penumbra de la noche. La pregunta expresada por Gillian giraba alrededor de nosotros.

Nadie decía nada. Solo se escuchaba la pesada respiración de Blake.

El clima era frío y el ambiente demasiado tétrico.

Todo era silencio total. Nadie se miraba fijo, nadie pronunciaba nada, teníamos una interrogante en mente, pero estábamos evadiendo la respuesta.

En estos momentos, se sentía más fácil decir una mentira piadosa que encontrar la verdad.

Pasaron varios minutos. Mi mirada seguía fija en Noah. Quien quiera que haya sido, debía odiar demasiado al chico para haberlo dejado de esa manera. O tal vez solo se le pasó un poquito la mano.

— Esto es una broma ¿Cierto? — pregunto Gillian, mirando con desconfianza el cadáver frente a nosotros.

Connor se sentó en cuclillas junto a la pierna de Noah. — Este año te volaste la barda hermano. ¡Qué buena broma has hecho, Noah! — El chico acaricio la herida frente a él y tomo un poco de sangre entre sus dedos.

—Mmm Connor, yo no haría eso si fuera tú...— respondió Oren intentando decirle la verdad al chico.

—Tonterías. —agregó el rubio, viendo asombrado como aquel líquido viscoso coloreaba los dedos de su mano. —Hasta parece real.

—Es real. — respondí con simpleza.

—Espera ¡¿QUÉ?! — Connor nos miró, estupefacto.

—Noah está muerto. La sangre es real y tú acabas de dejar tus huellas dactilares en lo que parece ser la escena del crimen. — explico Oren con parsimonia.

La cara de Connor reflejo un gesto de terror y asco a maneras iguales. Aventó como pudo el cuerpo de Noah, perdió el equilibrio y cayó de sentón en el suelo.

A decir verdad, su reacción fue bastante divertida. Todos soltamos una carcajada estruendosa. Todos, a excepción de Blake que mostraba una mirada fría y sombría.

— ¿Quién lo hizo? — cuestiono Gillian mirándonos con una sorprendente serenidad. Miro la daga que reposaba en mi mano, me había olvidado de ella. Mi palma se aferraba al artefacto, mi puño estaba cerrado fuertemente en ella.

Su mirada azul celeste volvió a mí, me cuestiono, pude ver la pregunta a través de sus ojos. No había coraje o dolor por la muerte de Noah, solo una intensa curiosidad de leer la respuesta a través de mis ojos.

—No sabemos qué fue lo que paso. — declare respondiendo también en nuestra conexión de miradas. — Mi mente no recuerda nada, solo sé que lo encontramos a nuestros pies al despertar.

—Blake lo encontró. — anunció Oren. Todos dirigimos nuestra vista al castaño que se encontraba ausente en el momento.

—Buscaremos explicaciones después. Creo que lo mejor será esconder el cuerpo y...— trato de explicar Gillian, pero fue interrumpida por un castaño que cayó estruendosamente de rodillas frente al cuerpo.

— ¡NOOO! — Blake grito ensordeciéndonos a todos. —No podemos hacer eso, debemos llevarlo con sus padres. — termino entrecortadamente abrazando torpemente el cuerpo ensangrentado de Noah.

Todos quedamos pasmados ante su cambio tan explosivo de actitud.

— ¡Estás idiota! — intervino Oren un tanto alterado. — La policía nos interrogará y no tenemos ni la jodida idea de que es lo que paso. Yo no pienso ir a la cárcel por un crimen que tal vez no cometí.

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