Capitulo III

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El día siguiente recibe a Jana y Tom con una lluvia tranquila. Ambos se levantan a las siete de la mañana, se duchan por un largo tiempo y luego se visten con jeans y alguna camiseta de mangas largas.

Jana se arrepiente de haber aceptado que Tom la pasara a buscar ya que sus mañanas nunca son buenas, odia levantarse temprano y peor aún cuando el clima está excelente para dormir hasta tarde.

Un mensaje llega a su teléfono, Tom le hace saber que en media hora estará en su puerta.

— Veinte minutos para dormir — murmura recostándose de espaldas en la cama.

Rápidamente queda en un profundo sueño pero el horrible sonido de la tercera llamada en su teléfono hace que se despertara.

— ¿Hola? — contesta adormilada.

— ¿Jana? Soy Tom, estoy afuera.

Se sienta de golpe — Oh si — corre hacia el espejo — Maldición — susurra mientras cepillaba su cabello con rapidez.

— ¿Estas lista o necesitas más tiempo?

— Salgo en unos segundos — corta y corre al baño a cepillarse los dientes una vez más.

Guarda lo más esencial en su bolso, toma su abrigo y sale de su hogar encontrando a Tom con su teléfono en mano.

— Hey.

— ¿Te desperté? — sonríe divertido.

— No, no — niega con rapidez — bueno si pero no importa, te dije que no era una persona madrugadora.

Tom ríe y abre su paraguas para poder cruzar el mini camino hacia el auto.
El mayor rodea los hombros de la joven mientras caminaban, ésta inhala la colonia que el actor tiene impregnada en su ropa. 

En el camino hacia el estudio, Tom coloca la radio más escuchada.

— ¡Eres tú! — chilla cuando el último tema de Jana suena por los parlantes del vehículo. La joven ríe con ternura.

— No hay nadie — habla mirando hacia las casas donde se seguro deben estar todos durmiendo como ella desearía estarlo — solo a nosotros nos dan una entrevista tan temprano.

— Nuestros fans tampoco deben estar muy contentos, varios se lo perderán — comenta.

— ¿Ves? Deberían hacer las entrevistas a la noche donde casi todos están despiertos sin nada que hacer.

— Supongo que tienes razón. Oye ¿tienes hambre? Hay un Starbucks por aquí — mira a sus costados buscando la tienda.

— Un café me vendría bien para despertarme por completo.

— Un café será.

Hiddleston se mete en un Car-Starbucks.

— Buenos días, ¿que desea pedir? — habla la voz robótica.

— Dos cafés...¿cargados? — se gira a preguntar a la chica que lo miraba embobada pero asiente a su pregunta — dos cafés cargados y dos trozos de pastel de chocolate.

— Pase por la ventanilla por favor, ahí le entregaremos su pedido, muchas gracias.

Tom conduce hasta la ventanilla haciendo una maniobra al girar dejando a Jana babeando. Una de sus debilidades es ver a chicos ardientes conduciendo con confianza.

— ¿Pastel de chocolate? — su boca se hace de agua al pensar en el chocolate.

— Puede que haya averiguado sobre ti un poco, según tus fans te gusta comenzar el día con un buen trozo de chocolate.

Entre canciones y películas - Tom Hiddleston +18 [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora