☁7. Ultraviolence☁

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⚠Violencia⚠

Era un sábado por la noche en la hermosa Rumanía. En una lujosa casa se llevaba a cabo una fiesta entre amigos  y conocidos. Era una bellísima casa, con lujos hasta donde podías ver, pinturas renacentistas adornaban las paredes, mueblería de la más fina madera, la casa tenía una de las pinturas caqui más pulcra y acogedora. La cena fue un verdadero agasajo, la comida más exquisita jamás probada fue servida por meseros con trajes que los hacían lucir como pingüinos. 

La fiesta era un verdadero goce, había una orquesta que tocaba la música más relajante y exquisita, en algunos momentos de la noche se atrevían a tocar música al puro estilo de Nueva Orleans. Todos hablaban de un tema en particular. Se podía escuchar con claridad, por allá y por acá, un extenso diccionario de idiomas, como por ejemplo: Rumano, Alemán, Ruso, Español, Inglés, Francés, Italiano y demás idiomas. Era una fiesta universal.

El joven Zemo se encontraba en aquella fiesta o convivio, como prefieran llamarle. 

Vestía de gala. Unos pantalones de esmoquin negros, zapatos bien pulidos y brillantes de un tono negro. Camisa blanca, usaba un hermoso chaleco negro que acentuaba a la perfección su silueta. Utilizaba un moño negro, propio de un esmoquin. Su cabello estaba bien peinado hacia su costado derecho. Desprendía un aroma exquisito debido a la fragancia que utilizaba. No llevaba un saco consigo, se lo quito debido a que le dio algo de calor. 

Se encontraba en aquella fiesta gracias a su esposo, James Buchanan Barnes. Su esposo tenía muchos conocidos en Rumanía, algunos de ellos eran pertenecientes de la alta sociedad, personas de alta alcurnia, por lo que este tipo de fiestas o reuniones, eran muy comunes para ambos.

El joven Helmut no se encontraba sólo, pero no estaba precisamente con su esposo. Estaba teniendo una amena y grata conversación con el Capitán John Walker, quien era parte de las fuerzas aéreas de Estados Unidos. Conversaban sobre los servicios de Walker, este último en un acto amable, le ofreció una nueva copa de vino tinto, Zemo la aceptó con gusto, pues su anterior trago se había terminado.

—Veo que has encontrado distracción, cariño.

La grave voz de su esposo tras su espalda, le hizo tener escalofríos.

—Sólo conversábamos sobre mis servicios en la fuerza aérea. Un gusto, soy John Walker—saludo con una sonrisa, el rubio, quien vestía con elegancia un traje gris oscuro, con algunas medallas en su saco sobre el costado izquierdo.

—James Barnes, esposo de Zemo—tomó la mano que le extendía el rubio. El tono de voz del pelinegro sonaba fuerte, con recelo. Su agarre fue fuerte, incluso hubo un apretón más de la cuenta, llegando a que el rubio hiciera una mueca de molestia por el fuerte agarre. 

James lucía encantador. Utilizaba pantalones de vestir negros, camisa blanca bien fajada, un hermoso saco tinto atersiopelado con las solapas negras. Debido a la gala del lugar, utilizaba un moño negro. En sus pies portaba unos bien pulidos zapatos de vestir negros. Su cabello estaba bien peinado, siempre manteniendo su lado coqueto con las puntas de su cabello algo levantadas, luciendo un peinado casual. El aroma que desprendía era amaderado, olía delicioso. 

Tomó por la cintura a su esposo, mientras depositaba un beso en el costado izquierdo de la cabeza de este. Por fuera, Zemo dio una ligera sonrisa ante el gesto, pero por dentro, estaba realmente preocupado.

MAGIC CITY/One-Shots WinterBaronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora