𝐍𝐨 𝐬𝐨𝐲 𝐭𝐮 𝐫𝐞𝐟𝐥𝐞𝐣𝐨 - 𝐓𝐚𝐞𝐤𝐨𝐨𝐤

III

La mansión permaneció sin un dueño oficial durante dos años. Tiempo en el cual el hombre sin emociones había cuidado al pequeño niño que vivía dentro de los espejos de la casa. Porque partir de el cristal fue fundido y puesto en los espejos esa fue su nueva prisión y el controlaba lo que se reflejaba en ellos.

Esa fue la razón insignificante del suicidio de aquel hombre arrogante.

Aquél niño de apenas nueve años sabía lo que hacía desde el principio, después de todo podía saber la debilidad de todos, o bueno casi todos a excepción de una solo persona.

Cada vez que el hombre se veía en un espejo una nueva imperfección aparecía, lo soportó durante un año hasta que no pudo soportar su supuesta horrible apariencia y acabó con su vida.

Y si aquél hombre que alguna vez fue su asistente en vida, cuidó del niño.

Nadie quería comprar la propiedad, rumores vagaban de boca en boca deformandose sobre la muerte de aquel hombre, y por eso nadie la quería tener algo que ver con ella.

No fue hasta dos años después de su fallecimiento que por fin un comprador apareció en el mercado y la compró.

El señor Jung era un hombre de mediana edad y con gustos inusuales. Hombre el cual no creía en los rumores absurdos sobre la mansión y mucho menos en las cosas como la magia y brujería, el no era una persona supersticiosa.

Su único familiar cercano era su primo que vivía en Daegu, el cuál se había casado varios años atrás y había tenido un hijo al que llamaron Jung Hoseok. Su querido sobrino el cual compraba regalos algo raros pero interesantes para en chico.

Después de mudarse a Seúl visitó varias veces a su primo y sobrino. Pero después de un años ya no lo hizo. No fue hasta dos años después que su primo se había preocupado por el y había ido a visitarlo.

Pero una gran sorpresa es la que se encontró al ver a su primo con un pésimo aspecto y muy alterado. Decía cosas sin sentido y palabras sin conectar. Había muchas cosas rotas.

Lo metieron a un psiquiátrico después de saber bien sobre su situación y contratar a un especialista.

Le pagaron aún equipo de limpieza para que arreglara la casa. Ahí se dieron cuenta de el pequeño gato que también era residente en el lugar. Aquél gato no parecía querer irse. Contrataron a una mujer para que cuidara del gato y limpiará la casa, está renunció después de dos semanas. Después de ella vino otra que duró menos tiempo y renunció.

Y así es como llegamos a esta situación. Hoseok al igual creyendo que todas esas palabras eran patrañas le ofreció la oportunidad de quedarse en la casa a su mejor amigo gratis a cambio de que cuidara al gato. A sus padres les pareció buena idea después de ver qué no habría nadie más que quisiera quedarse en aquella mansión.

...

[Pov Jungkook]

Aquél hombre que me encerró un día nunca volvió.

Un hombre que me caía realmente mal vino después junto a otros dos hombres, a uno de ellos no lo volví a ver después y el otro resultó ser el hombre de confianza de aquel hombre insoportable. El me cae bien, es un hombre interesante.

Con todos esos martillos y demás cosas que usaron para quitar mi cristal que estaba entres las piedras, martillando una y otra vez me dolía la cabeza. Después de eso sentí el peor calor de toda mi vida, mi corta vida. Con todo eso me desmayé.

Y cuando menos lo supe ya estaba en una mansión llena de lujos. Podía trasladarme de un espejo a otro, lo cual era bueno ya que los había por toda la casa, pero aún no podía salir.

El hombre arrogante murió después de un año.

Charles, su asistente me cuidó durante dos años. Me sorprendió que al mostrarme ante, por el hambre que tenía, haya actuado con tanta normalidad y dado un emparedado. En esta cárcel puede pasar lo que sea que yo permita y puede salir sin problemas, pero yo no puedo.

Un hombre vino después de dos años y Charles se fue.

El señor Jung dejaba comida cerca de los espejos, lo suficiente como para que con ayuda de de una pinza podía meter.

Se volvió loco después de un tiempo. No se porque si nunca me mostré ante el, no quería hacerlo.

Después vinieron dos mujeres. Charles vino una o dos veces para darme comida y supervisar todo.
Me dijo que me comportara, cosa que obviamente no pude hacer, no se que esperaba de mi, solo tengo catorce años todavía.

No pase desapercibido para ninguna de las dos y se asustaron.

La segunda mujer empezó a empacar hacer tres días, estaba histérica. Ayer por la mañana, muy temprano, ella salió de la casa con su maleta lo más rápido que pudo cerrando la puerta con llave.

Supuse que otra vez había hecho algo mal y ahora estaba huyendo.

Al principio cuando se fue pensé que tal vez al día siguiente o en la tarde vendría Charles.

Me sorprendí al escuchar después de quince minutos más o menos la llave encajarse en la cerradura para luego ser abierta por ese chico lindo.