HARPER
Estábamos acostados en la cama de Sky con mis brazos rodeándolo por la cintura. La música se escuchaba de fondo mientras le hacia mimos en el cabello, por alguna extraña razón le gustaba que lo hiciera.
—¿Puedo saber por qué tus padres casi nunca están? Desde que te conocí han estado fuera —preguntó Sky con curiosidad.
—Bueno, debido a los negocios que tienen siempre están viajando —respondí.
—¿Cuándo regresan?
—Dentro de dos semanas —dije—. ¿Acaso quieres conocerlos?
—Quizás, ¿Te gustaría que lo hiciera? —volteé a ver a Sky de reojo.
—Si, porque no.
Eso me pareció una buena idea, sabía que mis padres les caería bien Sky, ellos normalmente suelen ser muy comprensivos y aparte era la primera vez que traería a un chico a la casa. Eso si que los sorprendería.
Me acurruqué junto a él llevando mi mano a su mejilla, Sky me miró y me sonrió. Se acercó a mí lentamente y me besó, al mismo tiempo que se subía ligeramente encima de mí. Llevé mis manos a su cuello para rodearlo. Sentí de pronto la mano de Sky acariciar mi pierna con suavidad y ternura. Se detuvo un momento para mirarme. Sus ojos tenían un brillo diferente.
—¿Todo bien? —inquirí.
—Sí —contestó sin dejar de contemplarme.
—¿En que piensas? —pregunté.
—¿De verdad quieres saber? —dijo con una sonrisa divertida.
—Si —asentí.
—Me gustaría hacerlo contigo ahora mismo—confesó—. Pero quisiera que nuestra primera vez sea especial.
—Hacerlo contigo lo hace especial —añadí sonriendo.
—Sabes a lo que me refiero.
—Escucha Sky, lo único que me importa es hacerlo contigo. Las decoraciones y esas cosas están demás.
Se mantuvo en silencio por un momento.
—¿A qué hora llega tu mamá? —le pregunté.
—Llega a las 11pm —respondió.
Miré a Sky directamente a los ojos.
—Tenemos 4 horas —comenté con una sonrisa traviesa.
—¿Quieres que sea aquí mismo? ¿Si estás consciente que estamos en mi habitación que por cierto está hecha un desastre? —comentó—. Si quieres cambiar de op...
Llevé mi mano a su boca para que dejara de hablar.
—Mejor cállate y bésame.
Sky no respondió. En cambio llevó sus manos a los costados de mi rostro para besarme, pero esta vez sus besos eran más intensos. Se alejó un poco para comenzar a besar ahora mi cuello, mientras tanto, su mano acariciaba mi pierna al mismo tiempo que me subía la falda. Regresó a mis labios para besarme de nuevo. Sentí ahora la mano de Sky por encima del encaje de mi calzón, pasó su mano por la tela hasta detenerse en mi punto más sensible. Comenzó a acariciarme con suavidad hasta que hundió su mano por debajo de este con cautela. Me contraje un momento cuando sus dedos rozaron mi parte íntima. Sky comenzó a masajear cada zona de forma delicada.
—¿Te gusta? —preguntó entre mis labios. Asentí con los ojos cerrados—. Dime si lo estoy haciendo mal.
—Lo estás haciendo bien —respondí soltando un leve jadeo—. Maravillosamente bien.
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La juventud perdida
Novela Juvenil5 jóvenes con vidas diferentes pero con algo similar. Todos se sienten perdidos en el transcurso de la vida de su adolescencia. ¿Podrán superar aquello que ven imposible y difícil de sobrellevar?