Nico Di Angelo (One-shots)

A Través De Tus Ojos (+18)

Nico no podía entender que rayos había visto Will en él.

El joven estaba más que consiente de sus defectos, no era muy guapo, nada si podía ser sincero consigo mismo. Tenía demasiados traumas para aguantar, era inseguro en cuanto a su sexualidad, no que dudará que era absolutamente gay, si no porque todavía había noches en las que el pensamiento arcaico de que aquella manera de amar no era correcta. Le costaba hablar de lo que sentía, sabía que Will era una de las mejores cosas que tenía en su vida, tenía pocas cosas buenas en ella, pero él definitivamente era de las mejores. Era hijo de Hades y ya con eso sabía que perdía muchos puntos ante los demás, daba escalofríos al estar cerca de alguien. Era brusco y solía perder la paciencia con facilidad.

En fin, Nico sabía sus múltiples fallas, lo que no entendía eran aquellas virtudes que habían hecho que el rubio se fijará en él

— Di Angelo carajo—la puerta de su cabaña fue abierta con poca o nada de delicadeza, por ella apareció una brillante caballera rubia

— Hey—susurro desde el suelo, estaba acostado en el piso junto a su cama con las piernas arriba de esta, había estado mirando el techo por más tiempo del que podía estar consciente, su voz sonaba débil y ligeramente ronca. ¿Cuántos horas llevaba así?

— Di Angelo ¿Qué rayos? Tres días has estado desaparecido ¿¡has estado aquí?! —esa si que fue una sorpresa para el menor, no podía creer que de verdad habían pasado tres días

— Baja la voz—tuvo que jalar su pantalón para tirar sus piernas junto a la cama, sus extremidades no le respondían de ninguna manera, seguramente por la falta de un correcto flujo de sangre por tanto tiempo

— Eres el colmo—se acercó hinchandose a su lado y le ayudó a recuperar la sensación en su parte baja

— Salte de tu papel de doctor un rato ¿si? Lo lamento las horas se me pasaron sin darme cuenta—Will lo miró con el enojo en sus azules orbes.

Nico recordó entonces sus cavilaciones anteriores, él definitivamente podía pensar y enumerar las razones por las que amaba a Will

— Tus ojos me recuerdan el cielo de Italia—acarició su mejilla paseando su dedo gordo en su pómulo cerca de sus ojos— las risas con mi madre y Bianca, tus ojos me recuerdan esos días donde todo era más feliz y tranquilo—bajo el dedo hasta sus labios, Will no dijo nada, aunque estaba claramente sorprendido— cuando me besas siento que mi estómago tiene perchas de mariposas reviviendo, mariposas que creí habían muerto con Percy, tu las reviviste y multiplicaste—roso sus labios con los del hijo de Apolo susurrando contra estos— estas caliente, si tengo frío solo me debo pegar un poco a ti y mi cuerpo se siente vivo, haces que cada uno de mis sentidos cobre vida y fuerza—sintió el aliento de Will haciendole cosquillas en los labios, su mano acarició su cadera

— Eres regañon—deposito un suave y casto beso en sus labios hablando sobre ellos— no me tienes miedo, si hago algo estúpido estas ahí gritandome—bajo su mano hasta el pecho ajeno, justo sobre su corazón— tus latidos son la mejor melodía, escucharlos me relaja y aleja mis pesadillas, saber que estas vivo aparta los demonios de mi interior—paso su mano hasta su espalda y la otra a su cuello pegándolo a él y besando sus labios con fuerza y algo de pasión, Will no tardó en corresponder acariciando su nuca, pero el acercamiento no duró mucho antes de que Nico se alejara de nuevo, solo un poco, sus cuerpos seguían completamente pegados— encajamos como dos piezas de rompecabezas, desde el primer día que me abrazaste entendí el significado de hogar, tu eres mi lugar, me complementas de tantas ridículas maneras que solo confirmo que eres mi otra mitad—beso la comisura de sus labios y luego la mejilla bajando a su mandíbula mordiendo ligeramente la piel— hueles a verano, es lo más ridículo ni siquiera sabía que el verano tenía un olor hasta que te conocí—recorrió el camino de su mandíbula hasta el cuello con la punta de su lengua, sintió al rubio estremecerse ante el acto