Entre Sombras-Planeta Atmos

PARTE 1 -Capítulo dos: El experimento-

Antes de entrar al bosque, durante dos días, se pusieron a prueba las habilidades de todos los participantes y se les dieron asesorías de cómo se iban a mover en el bosque, la ubicación de sus bases científicas y las normas de supervivencia.

Durante el primer día, Kassandra conoció a quien fue su primer amigo, Yohan Finnman. Un chico un año mayor que ella, de piel morena, alto, cabello ondulado, ojos cafés y un físico impresionante para un científico de la época. Su personalidad se desarrolló mientras más confianza sentía con ella, lo que la hizo descubrir que tenían gustos similares y un amor por la ciencia.

En el segundo día se les informó la posibilidad de crear pequeños equipos dentro del grupo para crear estrategias eficaces entre ellos; pero había una condición, si solo un equipo descubría algo significativo durante todo el experimento, la recompensa sería entregada a las 25 personas del grupo.

Obviamente Yohan y Kassandra formaron un equipo; sin embargo, casi al final del día se les incorporó un hombre de edad avanzada y baja estatura llamado Timoteo Fighmeann.  Se decía a sí mismo como el hombre más capaz de ayudarlos en su plan por la búsqueda del éxito, así que terminó convenciéndolos.

Su plan al final era obtener la sangre del morfóro de la manera legal (extraída del meñique de sus patas, ya que no hay presencia de un nervio que lo pueda alterar), y así, continuar con las investigaciones genéticas en el ADN de esa especie, cosa que nadie había hecho porque simplemente se limitaban a su característico poder balsámico en la sangre; pero durante los últimos días del experimento del año pasado, se tenían sospechas de que había algo más que eso.

Cuando llegó el día, a todos los esperaban en la primera puerta de seguridad para entrar al bosque. El área de seguridad era un amplio patio techado en el cual se encontraban unas inmensas puertas que daban al área de acondicionamiento.

Después de que todos llegaran, el supervisor Luyis hizo presencia y les recordó que solo tenían como máximo 10 días para descubrir algo, y también lo importante que era solo mantener por un día al ser vivo en el momento de su cautiverio, ya que el tranquilizante  solo duraba 28 horas, y si no se liberaba en ese lapso, habría consecuencias muy graves que podrían poner en riesgo la vida de todos.

Después de eso, las enormes puertas de metal se abrieron y dieron lugar a unos enormes pasillos que rodeaban casi en su totalidad a la base científica. Cada grupo fue llevado a su respectiva entrada, la Este, la Oeste y la Norte. A Kassandra y su equipo les tocó la Oeste.

Antes de salir, les dieron 30 minutos para tomar sus cosas y cambiarse para estar cómodos durante el viaje de 1 hora que harían para llegar a la base.

Esa base era la que más lejos se encontraba de donde estaban.  La más cercana era una que había a unos 5 minutos de la entrada Este. Esa les pertenecía a los Wolferos. Seres que, en su mayoría, parecían centauros, pero de muy pequeña estatura y eran totalmente apáticos. Actualmente se ha descubierto su reproducción, su peculiar lenguaje de ecolocalización y la evolución que presentaron desde la llegada del ser humano al planeta.

Kassandra tomó una ducha vaquera en los vestidores para estar fresca durante el viaje. Se puso la ropa que le ofrecieron y tomó la mochila que tenía su nombre grabado para dar una repasada a lo que contenía.

Había una pequeña cantimplora llena de suero hidratante, una libreta conmemorativa con una pluma azul que tenía el logo del lugar en la parte media, un botiquín de primeros auxilios, un localizador, una linterna y un paquete color verde que parecía ser comida militar.

Llegada la hora de partir, Kassandra se acercó al centro de excursión junto con Yohan y Timoteo para esperar a los demás y finalmente dar inicio al experimento. Cuando llegaron los 25, arribó una camioneta todo terreno color verde camuflaje hecha con un metal ligero pero compacto para evitar un percance durante el camino.