Entre Sombras-Planeta Atmos

PARTE 2 -Capítulo veinticuatro: Entre la verdad y el poder-

Kassandra le dijo a Adrián que haría un viaje de investigación al sector uno ya que, según ella, tenía un trabajo importante que hacer ahí; por lo que Timoteo lo visitaría de vez en cuando para estar al pendiente de él.

Adrián le dijo que no había problema. Él se veía más animado que antes.

Unos minutos más tarde, Kassandra bajó al vestíbulo del departamento, fue por su carro, y recogió a Ciké, quien la esperaba en la oscuridad del estacionamiento.

Se fueron en medio de la noche en el auto de Kassandra hasta que llegaron a la ya clausurada Base científica. Kassandra sintió una ola de escalofríos con solo verla. Muchos recuerdos negativos llegaron a su mente.

Los dos se bajaron sigilosamente del auto y se acercaron con cuidado al lugar. Kassandra usó su antigua credencial para abrir las puertas y poder acceder.

Ahí dentro, en medio de los escombros, había dos seres esperándolos. Eran Desauros. Esos seres tenían una apariencia parecida a la de un humano; sin embargo, su cabello brillaba y hacia pequeñas ondulaciones. Sus grandes ojos tenían un hermoso color azul y sus piernas estaban muy anchas, se parecían a las de un caballo; pero cabe resaltar que tenían cara de reptil. Aparte de que su piel se desintegraba poco a poco mientras se movían.

Uno se llamaba Toffi y la otra Cadia.

Cuando todos se acercaron para presentarse, los cuatro formaron un círculo y comenzaron a platicarle a Kassandra "su maravilloso plan".

Cabe destacar que los desauros no tenían boca. Ellos "hablaban" a través de la telepatía con otras personas, ya que ellos, al transmitir mentalmente la idea de lo que querían decir, cualquier persona con conciencia podía entenderlos perfectamente independientemente del idioma que hablara.

Por otra parte, regresando al plan, su método consistía en entrar directamente a uno de los túneles donde creían que se encontraba el regidor, y después de eso, dispararle con uno de sus dardos tranquilizantes a su pecho mientras él esté distraído tratando de controlar a la presidenta.

Kassandra no confiaba totalmente en su plan; pero ella simplemente se encargaría de darles el acceso, por lo que no se preocupaba mucho de la certeza de su método de ataque.

Los cuatro entraron a un pequeño agujero lleno de raíces y caminaron algunos metros adentro por el túnel de ladrillo que yacía después del agujero, hasta que se encontraron con la primera puerta de acceso. Kassandra acercó su tarjeta, puso su huella digital y acercó la retina de sus ojos para que la escanearan. Después de eso, la puerta se abrió. Este proceso lo repitieron otras tres veces hasta que finalmente llegaron a la última puerta. La puerta estaba muy abollada. Algunas raíces se dejaban ver por los bordes de esta, lo que confirmaba el hecho de que el regidor seguramente estaba ahí.

Kassandra abrió la puerta y después la empujó con dificultad para poder acceder. l

La puerta dio lugar a un largo y oscuro pasillo rodeado de las mismas raíces que habían visto en todo el recorrido. Kassandra se acercó a Ciké para decirle que no muriera, que lo necesitaba vivo si quería salvar a Adrián. Él, con una sonrisa en su boca asintió; pero antes de que él pudiera decir otra cosa, enormes raíces empezaron a salir del suelo y rodearon la puerta bloqueándoles el acceso.  

Los cuatro se alteraron, pero especialmente Kassandra.

Ella no se esperaba nada de eso. Iba a morir...

Cadia les dijo a los tres que tenían que seguir avanzando para encontrar una salida.

Los dos seres aceptaron, pero Kassandra no. Ella se estaba negando en avanzar. Estaba aterrada. Sin embargo, Ciké y Toffi la convencieron de avanzar y le prometieron que la sacarían de ahí con vida.