Entre Sombras-Planeta Atmos

PARTE 2 -Capítulo diez: Híbridos y Liesménitas-

Los ahogados gritos de dolor de Kassandra era lo único que se podía escuchar a lo largo del corredor del hospital.

El partero le seguía insistiendo que pujara con todas sus fuerzas hasta que finalmente el vagido del recién nacido se escuchó con claridad. Kassandra, aliviada, pidió verlo. Cuando se lo pusieron en sus manos, ella sintió su suave lanugo, admiró sus hermosos ojos verdes, y vio su hermosa sonrisa. Su pequeño Adrián al fin había nacido. Nada la podía hacer más feliz.

Después de dos días, fue dada de alta. 

Yohan pasó por ella y por Adrián para llevarlos al apartamento.

Cuando llegaron, Kassandra dejó y tapó a su bebe dormido en la cuna y se fue directo a la barra de la cocina con Yohan para comer algo.

Él le pidió que no se moviera tanto y que se fuera a la cama; pero ella se negó.

Kassandra logró sentarse (con algo de dificultad) a lado de Yohan y empezaron a platicar.

Hablaron por unos momentos acerca de los gastos y las citas con el pediatra que deseaban hacer para estar completamente seguros de su nuevo itinerario como padres. Después, bebieron un poco hasta que ambos decidieron irse a dormir.

Cuando se acostaron, ambos se abrazaron mutuamente para calentarse entre ellos por el fuerte frio que hacía esa hermosa noche; pero mientras Yohan lograba dormir, Kassandra movió su cabeza hacia el lado de la habitación que tenía enfrente , y viendo hacia la cuna, se dijo a sí misma en voz baja: "a ese niño le espera una vida maravillosa".

Los detalles no eran necesarios. Adrián tuvo una infancia completamente normal y terminó el preescolar con honores.

Kassandra y Yohan estuvieron en cada momento importante de su vida. Ambos eran buenos padres. Trataban a su hijo de la manera más gentil posible, y Adrián, aunque a veces era revoltoso, siempre fue muy educado en base a los valores con los que fue formado.

Sin embargo, las cosas se complicaron cuando entró a la primaria. Durante sus primeros años se mostraba demasiado fatigado y comenzó a presentar extraños síntomas en su cuerpo: Su cabello castaño empezó a crecer de manera rápida y comenzó a tomar un tono semi rojizo. También le salieron unas extrañas marcas cerca de los ojos y la espalda, y luego de unos días, su altura aumentó considerablemente y sus extremidades se deformaron un poco.

Kassandra no entendía completamente lo que le estaba sucediendo; por lo que lo llevó al doctor.

Al estar en la recepción, ella se percató de que Adrián no era el único niño que presentaba cambios físicos. Había varios niños con marcas parecidas a escamas en su piel, otros con una abertura bajo su ojo izquierdo, y hasta había una niña completamente calva con manchas en la cabeza.

El doctor no pasó a nadie a su consultorio y salió directamente al vestíbulo para dar el mensaje de que se estaban haciendo investigaciones acerca de esos sucesos; sin embargo, solicitó que los niños fueran mantenidos en cuarentena.

Kassandra estaba totalmente estresada. Cuando regresaron al apartamento, ella esperó la llegada de Yohan y le explicó todo. Ambos se alteraron bastante. No sabían que estaba pasando y solo se imaginaban las horribles enfermedades que podrían estar afectando a su hijo.

Yohan pidió algunos días para apoyar a Kassandra en los cuidados de Adrián. 

Adrián en diversos momentos presentaba leves dolores de cabeza, pero su temperatura corporal siempre aumentaba considerablemente. 

Yohan se la pasaba leyéndole algunos de sus libros favoritos mientras que Kassandra revisaba sus signos vitales cada 30 minutos para ver cuáles eran los cambios que presentaba.

Al final, su respiración, oxigenación y pulso estaban completamente estables, pero la temperatura era lo que más variaba. Sin embargo, una semana después, todo se tornó oscuro para Kassandra cuando finalmente la tan esperada noticia de que era lo que provocó eso en su hijo salió a la luz.

Al parecer eran bacterias que los seres esparcieron durante la rebelión que sucedió años atrás. Cada bacteria provenía de diferentes seres, y estos, las colocaron conscientemente en las bombas de color tinto que arrojaron al iniciar su segundo movimiento.

Esas bacterias, al ser inhaladas por una mujer, terminaban incubándose en su útero hasta finalmente fusionarse con el feto en el momento del embarazo.

Pero de igual manera, se tenía que tomar en cuenta que el tiempo que pasó desde las bombas hasta el día actual, era el tiempo que tardaba en incubarse completamente la bacteria para comenzar a actuar.

A los que padecían estos cambios los empezaron a denominar como -híbridos-. Por lo que, en base a las características de Adrián, seguramente las bacterias que le pasó Kassandra a él eran las que Ciké introdujo en ella cuando la amenazó.

Cuando Kassandra le contó a Yohan la parte en la que un ser le introdujo sus bacterias, él le empezó a recriminar que por que nunca mencionó eso cuando concibieron a su hijo; a lo que ella contestó que no sabía que esas bacterias podrían afectar a su hijo.

Sin embargo, aunque Yohan entendió lo que le dijo Kassandra; él cambió completamente su actitud por su miedo y odio a los seres.

Yohan comenzó a tener un resentimiento hacia su propio hijo; cosa que provocó que peleara con Kassandra durante varios días. Toda la problemática que surgió con eso los afectó demasiado, pero más a Adrián, quien cuestionaba muchas de las cosas que le estaban sucediendo. 

Así que, al no recibir completamente la ayuda de Yohan, Kassandra tuvo que tomar cartas en el asunto y se dispuso a cortarle el cabello a Adrián cada vez que creciera, y las marcas en su cara las taparía con un maquillaje con el color de su piel apiñonada.

Por otra parte, las ideologías de resentimiento en contra de esos niños "por ser diferentes", comenzaron a ser transmitidas de personas a personas a lo largo de la Ciudadela; dando lugar a una nueva religión llamada: liesménita.

Los liesménitas eran personas que se sentían atraídas a las creencias de los seres; pero debido a esto, ellos despreciaban a los niños de carácter "inmundo", porque desde épocas memoriales, esas personas tenían la creencia de que estos infantes rompían la ley de su naturaleza al cruzarse con seres superiores a ellos. (Esto es importante de recalcar ya que gran parte de la familia de Yohan se había unido a los Liesménitas)