Entre Sombras-Planeta Atmos

PARTE 2 -Capítulo diecisiete: Los "mente abierta"-

Cuando los cinco estuvieron listos, una camioneta pasó por ellos a la cede y los llevó a una avenida cultural del pueblo Awekima.

Fueron bajando por turnos. A Adrián le tocó al final.

En el momento en el que se bajó, Adrián se sintió nervioso y tenso. No sabía cómo iba a reaccionar la gente. Tenía mucho miedo porque sentía que todos lo veían y lo criticaban. Se sentía desorientado.

Rápidamente visualizó a Yosu entre la multitud, lo tomó del brazo, y lo llevó a una esquina en la que no había nadie. Yosu, asustado, le preguntó que por qué hizo eso, pero después vio la cara de Adrián. Estaba pálido y sudaba en frio. Yosu le dijo que se calmara. Sintió empatía por él y escuchó todo lo que le dijo.

Yosu simplemente le pidió que se levantara, y luego de que se levantó, ambos, caminaron entre la multitud. Adrián se mantenía muy cerca de él; pero en el momento en el que veía que las personas los miraban con admiración y gusto; respiró hondo, y teniendo en cuenta los consejos de Yosu, se apartó de él y siguió la ruta que se le había sido impuesta.

Adrián había empezado a confiar en Yosu.

Al momento de regresar a la cede, Federico los felicitó a todos porque las ventas de ropa habían subido un 16% en un solo día. Lo que confirmaba que el proyecto había funcionado.

Después de eso, Adrián fue a la sala común donde estaban todos los demás.
Él se sentó en uno de los sillones que estaba al lado de Yosu mientras Leslie comentaba que había entrado por el hecho de que sus padres la tenían harta porque a cada rato la molestaban con la competitividad entre las familias del sector uno. Ella provenía de una familia aleniana.

Después, Renatta y Colette, quienes eran hermanas, empezaron a hablar de las experiencias extrañas que les habían pasado durante el proyecto. Sin embargo, muchas de las veces en las que Renatta hablaba de alguna historia de los tipos que le pedían su contacto, Colette la interrumpía con sus propios comentarios o con alguna que otra historia propia. De hecho, la mayoría de las veces daba su opinión de algo que contaba Yosu o Renatta con un tono cortante. Pero de igual manera, después de algunos comentarios incómodos de Colette, Yosu animó un poco el ambiente de la sala hablando de sus propias experiencias.

Yosu empezó a hablar de las experiencias graciosas que le pasaron, y les contó que mientras caminaba en el área de comida, un señor se le quedo viendo, y por distraerse, se revolcó en una de las mesas donde había una familia comiendo, y ellos le empezaron a gritonear cosas ofensivas porque a su hijo le cayó encima toda la comida.

Tanto Leslie como Adrián se mantuvieron callados durante el resto de la plática; pero de igual manera, se unían a las risas de los demás cuando Yosu o Renatta decían algo gracioso.

Los cinco se conocieron lo suficiente en esas horas como para poder decir que eran buenos amigos, aunque Colette siempre mantuvo su actitud negativa durante toda la noche.

Después de que Sterius pasará por Adrián a la cede, y luego de haber llegado al apartamento, Sterius le invitó un té de vainilla con corsetas, y luego hablaron de lo maravilloso que fue su día.

A lo largo de los días Adrián superó su pánico en público y los demás siguieron haciendo su trabajo de la manera más eficiente posible. Las ventas aumentaron considerablemente, y al final, gracias a todos los participantes repartidos en la Ciudadela, la moda era tendencia en esos momentos.

Un día, mientras Adrián y Leslie hablaban de su colección de campines (pines que se ponen en el doblez inferior del pantalón), Yosu y Renatta llegaron corriendo con ellos y les dijeron que los sobres con su primera paga ya estaban listos.