Amanda caminaba hacia la sala de baile furiosa con ella misma, daba igual el rato que hubiera pasado, seguía sintiéndose una idiota por confiar en que al final lo suyo con Camile saldría bien. Era consciente de lo complicado de la situación, ella misma estaba aterrada por las consecuencias de lo sucedido la noche anterior, pero a la vez era lo que deseaba y no se podía arrepentir de haberse arriesgado. Le habría gustado que Camile le diera la oportunidad de hablar antes de salir huyendo.
La sala de baile estaba en un edificio separado, una pequeña construcción que se usaba para almacenaje en la planta baja y sala de baile en la primera planta. Abrió la puerta que daba a las escaleras que se dirigían a la primera planta, se escuchaba música en el interior de la sala, lo que le pareció extraño pues Joan Capdevila les había dicho que estarían solas para poder examinar las cajas de Natalia. La puerta estaba abierta, Camile estaba de pie al fondo mirando por una de las enormes ventanas mientras Roxette ponía la banda sonora. El antiguo tocadiscos había sido reemplazado por un sofisticado equipo de música con dos torres de CD's al lado.
– Creí que te habías marchado. – dijo Camile sin darse la vuelta.
– Yo pensé igual cuando al despertar me vi sola en la cama. – dijo sin disimular su enfado.
– Mandy... – La rubia se giró y Amanda pudo ver que había estado llorando – Necesitaba pensar por eso me fui cuando aún estabas dormida.
Amanda no se movió del sitio así que fue Camile la que se fue acercando despacio mientras hablaba.
– Cuando esta mañana fui consciente de lo que había pasado entre nosotras me entró el pánico. – Hizo una pausa y suspiró – Esto, sea lo que sea, puede acabar por complicarse y...
– Afectar a la relación que tiene mi madre con tu padre. – dijo Amanda y Camile asintió. – Yo también tengo miedo Camile.
– Pero...
– Pero no puedo negarme a mí misma como me siento cuando estoy contigo. – Camile estaba ya frente a ella, muy cerca.
– ¿Cómo te sientes?
– ¿Acaso no lo sabes? – Amanda puso sus manos en la cintura de la rubia y esta la rodeó por el cuello – Me das palpitaciones, ganas de no parar de sonreír, incluso cuando no te veo.
– A mi me falta el aire cada vez que te veo. – dijo ahora Camile – Y solo puedo pensar en besarte desde que me desperté esta mañana.
– Hazlo. – La retó Amanda.
– ¿Y después qué? – Preguntó Camile cada vez más cerca del beso.
– Después afrontamos las cosas juntas, además... – Tiró de la cintura de Camile hasta pegarla del todo a ella haciéndola reír – Mi madre es la que nos quiso emparejar.
Y se besaron, dejando atrás ese inicio de mañana amargo para dar paso a lo que tendría que haber sido desde el principio. Amanda acabó con la espalda apoyada en una de las paredes mientras abrazaba a Camile para no alejarla y poder seguir disfrutando de ese beso un largo rato más. Cuando finalmente se separaron ambas sonreían, tenían mucho que hacer, seguramente más inseguridades y miedos que vencer, pero al menos por ahora estaban juntas en eso.
– Tenemos que ponernos con las cajas de Natalia. – dijo Camile sin hacer ningún amago de alejarse de allí.
– Cierto. – Volvió a atrapar los labios de la rubia – Luego.

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DIRTY DANCING (ALBALIA)
Fanfiction¿Conocéis la película? Pues eso con Alba y Natalia de protagonistas. Dos personas de mundos distintos, un amor que puede parecer condenado al fracaso y baile, mucho baile. Bienvenidas al mejor verano de vuestras vidas.