Capítulo 35

5.3K 345 74
                                    

T/n: ¡Jungkook! -Grito-

-Clava sus enrojecidos ojos en mi y sonríe. Corro hacia el y trato de que no lo vuelva a hacer-

T/n: ¿¡Acaso estas loco?! -Grito viendo las dos líneas de polvo blanco puestas en su escritorio- ¡¿Cómo se te ocurre drogarte?!

-Aparto sus manos de lo que sea que este consumiendo y tomo su cara entre mis manos arrodillándome frente a el. Tiene la mirada desorientada y la preocupación me embarga por completo, siento las lagrimas asomarse pero me reusó a que salgan.-

T/n: ¿Por qué lo hiciste? -Pregunto lo mas tranquila que puedo-

-Centra sus ojos en mi rostro y con una mano acaricia mi rostro-

Jungkook: Eres hermosa -Consigue decir-

-No dijo nada, no voy a caer en sus palabras y mucho menos estando así. Él no puede decirme eso después de como me ha tratado hecho sufrir.-

Jungkook: Siempre lo has estado

T/n: ¡Ey! Jungkook reacciona, ¿Estas bien?

-Alza los hombros restándole importancia-

Jungkook: ¿Me estas engañando? -Lo miro con el ceño fruncido.-

T/n: ¿Qué?

Jungkook: Estas con otro hombre, me estas engañando. Tu eres mía tu eres mi Diablilla -Dice apuntándome con el dedo índice-

-La furia me recorre, es inaceptable lo descarado que es ¡No tiene vergüenza para acusarme de algo así! No me molesto en contestarle, esta drogado y no pienso gastar saliva en palabras que mañana o en unas cuantas horas no recordara. Me pongo de pie y le ayudo a pararse de la silla.-

T/n: Vamos a "tu" habitación -Dijo y lo jalo para empezar a caminar.-

Jungkook: Eres mía ... lo sabes

-Duele que aun en este estado me siga viendo como un objeto el cual tiene años de pertenecerle. Me hago la sorda y consigo -a duras penas- llevarlo a su habitación. Lo siento en el borde de su cama y empiezo a quitarle la corbata.-

Jungkook: Te pareces a ella

T/n: ¿A quien?

Jungkook: A Lily mi hermana -Sus ojos brillan con algo que no pude descifrar, es tristeza, odio y melancolía.-

-No tenia ni idea que tiene una hermana, y la verdad es que no se nada de el, pero sacarle las cosas en este estado no estaría para nada bien, pero si quería preguntarle algo.-

T/n: ¿Qué paso con ella? -Poco a poco le quito el saco también-

-Desvía la mirada y aprieta la mandíbula haciendo que los huesos de ese lugar resalten. No contesta y entiendo que he tocado un tema delicado y prohibido para el, sea lo que sea que le duele, su mirada lo dice todo.-

-Toma una de mis manos que ahora desabrochan su camisa y la besa repetidas veces, cada toque de sus labios en mi piel esta se eriza. Mis ojos se empañan y retiro mis manos de las suyas, siento su mirada sobre mi. Le quito la camisa, niego con la cabeza, no esta bien.-

-Me acuclillo y le quito sus zapatos, para ese entonces mis mejillas ya están empapadas del liquito que de mis ojos sale. Su mano viaja a mi cara y la levanta hasta poder mirarlo.-

- Limpia mis lagrimas y me mira a los ojos.-

Jungkook: Oh mi Diablilla, no mereces esto. Siento tanto no poder darte la vida que mereces, pero te juro que no me volverás a ver jamás. Eres una gran mujer mi Diablilla -Susurra-

-No se como, ni porque, en que momento llegamos a esto. Pero solo se que tener su cabeza recostada en mi pecho y acariciar su suave cabello con mis dedos es lo mas hermoso que alguna vez haya experimentado.-

Sin tiempo para morir (Narcotraficante Jeon Jungkook  Libro I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora