Capítulo 3: Humo y Espejos

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--¡Glaceon, a escena!--

Lancé mi pokebola hacia adelante. Se abrió en un destello blanco. En el improvisado campo de batalla frente a mí, mi glaceon se materializó, estirando sus piernas.

Prácticamente pude sentir la sorpresa que la atravesó al ver a Drew. Los pokemon de Drew habían luchado contra Glaceon bastantes veces en el pasado, y fue agradable ver que incluso con el paso del tiempo mi pokemon no había olvidado una cara tan familiar. Sonreí mientras ella saltaba felizmente; a pesar de ser algo mayor, todavía era una pokémon joven en el fondo, y era tan obvio como la luz del día que se estaba conteniendo para no correr hacia adelante y acurrucarse contra Drew.

Drew, que estaba de pie al otro lado del campo de batalla, le sonrió a Glaceon, levantando una mano para levantar su sombrero en un gesto de saludo. Me miró a los ojos, sacó una pokebola de su cinturón y la arrojó hacia adelante. Se abrió tan pronto como llegó al suelo.

Vi la mirada carmesí de Absol, el poderoso tipo oscuro reafirmándose de inmediato. Sin embargo, tan pronto como nos vio a Glaceon y a mí, su expresión seria decayó, los bordes de su boca se movieron hacia arriba. No había visto ninguno de los Pokémon de Drew en bastante tiempo. Mientras estaba allí, viendo a Absol y Glaceon sonreírse el uno al otro, me sentí como volviendo a través del tiempo hacía el pasado, que el tiempo se había invertido diez años y Drew y yo nos enfrentábamos en una arena de competencia, y nuestros pokemon cargaban con nuestra determinación de ganar.

--Glaceon se ve más fuerte que la última vez que la vi--, dijo Drew. --Veo que la has estado entrenando--

--Por supuesto-- Eché otra mirada a Absol. --Y veo que tú también has estado entrenando a Absol--

Absol enderezó su postura, orgulloso.

--¿Esperabas algo diferente de mí?-- Preguntó Drew.

No había visto ni escuchado que Drew participara en ningún concurso en los últimos diez años, por lo que no pude evitar la sospecha de que Drew se había tomado un descanso del entrenamiento de Pokémon en general cuando se fue. Ahora, sin embargo, el Absol que se mantuvo firme y valiente frente a él demostró que estaba equivocada, y no podría haberme sentido más honrada.

Una multitud se había reunido alrededor de Drew y de mi. Me recordó a los viejos tiempos, donde Drew y yo veíamos a la audiencia en una arena de competencia susurrar cosas entre sí, emocionados, viendo como salíamos al campo de batalla de la arena, preparándonos para luchar entre nosotros y robar el aliento de nuestros espectadores en el proceso.

El recuerdo me puso nostálgica.

Lionel pronto se abrió camino al frente, habiéndose ofrecido a servir como juez de nuestro partido. Levantó las manos y gritó: --¡La batalla entre May Maple de Petalburgo y Drew Trandafir de LaRousse comenzará ahora!--

Señalé hacia adelante. --¡Glaceon, rayo de hielo!--

Glaceon abrió la boca, disparando un rayo de hielo directamente hacia Absol.

--¡Esquivalo!-- Ordenó Drew.

Absol gruñó, saltando justo cuando el rayo de hielo lo iba a golpear. Aterrizó a su lado y corrió hacia adelante. La guadaña que sobresalía de su cabeza brillaba de color púrpura. Tajo Umbrío. Ese movimiento no me era ajeno y sabía que era poderoso.

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