She [H.S.] (Español)

27

-Tengo una idea- dijo Harry dando otro paso hacia mí.

-¿Cuál?- dije con la voz entrecortada mientras él se acercaba cada vez más a mí.

Antes de que pudiera reaccionar, Harry cortó el espacio que quedaba entre nosotros y fundió nuestros labios en un beso.

-Harry- exclamé sorprendida contra sus labios, pero eso solo pareció animarlo más. -Estamos en un baño- le recordé y eso lo detuvo por un segundo.

Rodeó mi cintura con sus brazos y retrocedió unos pasos hasta chocar con la puerta, a continuación oí el sonido de la cerradura cerrarse y tuve que morder mi labio inferior para disimular la risita que se formó en mis labios.

-¿En dónde estábamos?- me dijo riendo. -Ah, ya me acuerdo.

Volvió a unir sus labios con los míos y me empujó aún más contra la pared. Me estaba volviendo loca.

Mordió mi labio inferior con deseo y mi lado racional se desvaneció.

Desesperada comencé a desabrochar su camisa y Harry fingió mirarme sorprendido. Mis mejillas se tiñeron de rojo pero seguí haciéndolo hasta que sus tatuajes quedaron a la vista.

Sus manos viajan por debajo del vestido que traía puesto y ágilmente llegan al borde de mis panties, quedándose ahí por un tiempo, torturándome con su tacto.

Abandonó mis labios y comenzó a besar mi cuello, amaba eso.

-Harry- gemí con desesperación, y eso pareció ser la gota que colmó el vaso, porque lo siguiente que sentí fue como su mano viajó dentro de mis panties.

Sus dedos se concentraron en ese punto placer que solo él sabía dónde estaba tan bien, arqueé mi espalda en respuesta y escuché su risa maliciosa.

-Joey-susurró de pronto en mi oído, lo que mandó escalofríos a todo mi cuerpo.

-Harry- respondí.

-Vámonos de aquí.

Busqué su mirada y me encontré con sus ojos llenos de deseo volviéndome loca.

No necesitó repetírmelo, porque al segundo ya estábamos los dos saliendo del baño mientras Harry se abotonaba su camisa.

-Disculpa, pero surgió algo y tenemos que retirarnos- se excusó Harry con seriedad frente a su amigo.

Pero yo no podía aguantarme más y solté una risita divertida, lo que hizo que Harry también comenzara a reírse.

-¿Está todo bien? -Preguntó su amigo y yo me reí aún más.

-Sí, sí, solo... nos olvidamos que Joey tenía que comprar unas cosas urgentes.

-Descuida, nos vemos otro día amigo.

Su raro amigo por fin nos dejó ir, y antes de salir de la habitación mis ojos se cruzaron con la mirada asesina de Aiko.

-¿No tenías una mejor excusa?- le dije una vez que estuvimos en el auto del chofer.

-¿Qué? No es del todo mentira.

-¿Ah si? Qué es lo que tengo que comprar tan urgente.

-Condones- dijo Harry con seriedad y yo rápidamente dejé de reírme.

-Estás bromeando ¿verdad?

-Lo siento, es que ya usé los únicos que traje la otra vez.

-No hay forma de que me baje a una tienda a pedir condones- dije seria.

-Yo no puedo hacerlo, sabes que no.

-Pues entonces salimos de la cena para nada- dije cruzándome de brazos.