29

900 62 0
                                    

Todo se volvió a acomodar tan rápido que ni me dio tiempo de pensar en otra cosa, o al menos eso intenté convencerme a mi misma.

Hablé con Harry por teléfono unas cuantas veces, pero ni él ni yo teníamos tiempo para nada últimamente.

No le hablé de las fotos porque estaba esperando que él me lo mencionara, pero jamás lo hizo.

Así que después de unos días, los paparazzis se cansaron de acosarme en mi aburrida rutina y se olvidaron de mí.

Aunque no había pasado lo mismo con las fans, era impresionante como Harry podía tener tanto efecto en tantas chicas en todo el mundo, y aunque trataba de que no me afectara, no podía evitar sentirme mal por las cosas que decían de mi en las redes sociales.

Entonces me puse a pensar en lo qué pasó y en lo que estaba pasando en mi vida ahora. Todo aquello por lo que había luchado por fin se me estaba dando, y yo no podía disfrutar de ello porque no dejaba de pensar en Harry Styles.

A penas tuve una pausa corrí a la sala de descanso y busqué mi celular.

"¿Te puedo llamar?" le mandé, con la esperanza de que me contestara inmediatamente, pero no pasó.

Me metí a twitter y después a Instagram, y así, desperdicié mi tiempo libre en las redes sociales.

Estaba por dejar mi teléfono para acostarme a dormir una siesta y apareció una foto que me llamó la atención.

"Harry Styles en LA anoche"

Ponía el texto, pero no era eso lo que me llamó la atención, fue la chica que iba con Harry.

Por supuesto que Harry tenía amigas, eso no era novedad, pero algo hacía que no pudiera dejar de mirar la foto.

-Basta Joey- me dije a mi misma y dejé mi celular a un lado.

A la noche volví a la sala de descanso, tenía 30 minutos para dormir porque esa noche estaba de guardia. Pero por supuesto que no podía dejar de ver si Harry me había respondido.

Ningún mensaje. Volví a abrir mis redes sociales y esta vez fui directamente a la página que había alzado las fotos de Harry anoche.

"Harry Styles y modelo de Victoria's Secret saliendo juntos"

Sentí una punzada en mi corazón. Era la misma chica de la noche anterior, pero ahora estaban caminando por la ciudad.

Ni siquiera había pasado un mes de que volvimos de Tokio, y él no había perdido el tiempo.

Rápidamente volví a sacarme esas locas ideas de la cabeza. A estas alturas ya sabía bien lo mentirosas que podían ser las páginas de chismes. Seguro estaba todo sacado de contexto.


Al día siguiente, cuando el sol ya estaba brillando nuevamente en el cielo, yo estaba saliendo del hospital. Estaba agotada.

Emprendí mi camino a la parada del metro cuando mi teléfono comenzó a sonar y yo me apresuré lo más que pude en contestar. Era Harry.

-Buenos días- dijo él del otro lado de la línea, claramente estaba de buen humor.

-¿Buenos días?- respondí confundida- A qué se debe que tengo el honor de tu llamada.

She [H.S.] (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora