Sacrificio🤐

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Este capítulo puede contener escenas sensibles para algunas personas, por favor lea bajo su propia responsabilidad. Gracias.

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.... Sale de las duchas públicas, con una sucia toalla atada a su cintura como única prenda de vestir. Su flaco torso, lleno de músculos y sobre todo, de tatuajes, está completamente expuesto mientras gotas de sudor caen perlando su cuerpo. Y no solo de sudor, sino de sangre.... Y, se ve al rubio con los puños llenos de ese líquido rojizo mientras una pequeña cortada en su rostro hace que brote algo de sangre de su rostro también...

Se lava las manos en el lavamanos, bajo la mirada atónita de los otros presos. Atónita, pues actúa con una normalidad increíble e incluso se permite silbar despreocupado mientras acaba de ser hace unos minutos atacado con una navaja mientras se bañaba.

Bueno, parece que hoy tambien logró ser más rápido que la competencia, y golpear al rival hasta dejarlo inconsciente. Si, ya las enfermeras deben odiarlo por darles tanto trabajo...

Pero bueno, el no tiene la jodida culpa. Esos idiotas se lo buscan por atacarlo por la espalda. ¿Por qué no vienen de frente?

Porque son unos cobardes... Sencillamente por esa razón...

Y es que, el chico de cabellos rubios, no es precisamente que tenga apariencia de matón. Si ,es verdad que mide quizás un tin por encima de la media, pero no es alto como tal... No para su edad. Es verdad que tiene un cuerpo casi de modelo, pero no tiene grandes músculos...quizás producto de su genética o de la mala comida y estilo de vida que lleva...
Quizás no tenga apariencia de matón a pesar de su estilo de andar malote, sus tatuajes y pendientes y sus duros antebrazos. Pero tiene algo...

Es un rayo. Veloz. Rápido... A pesar de ser una persona '' pasiva'' desde su punto de vista, si lo atacas no se contendrá y te sacará de combate rápidamente.

Otra cosa... Es brutal. No tiene compasión. Es una de las cosas de las que se arrepiente pero... Ellos se lo merecen después de todo... Y si le pasara a él algún día...sabe que también se lo merece y mucho peor...

Además... Es frío, no demuestra emociones ,es bueno mintiendo y manipulando a las personas...
Todo eso producto de su estadía en la cárcel... Y el último detalle, el que hace que todas las personas le teman... Es su mirada asesina. Su sonrisa sádica... Y la tranquilidad con las que se lava los puños llenos de sangre luego de darle una paliza brutal a sus oponentes...

Ese chico rubio de veintiséis años, que ahora se encuentra sentado nuevamente en su celda, ya vestido de color naranja con su mono de color entero y esperando que sea la hora de hacer ejercicios, pues es sencillamente un monstruo...

Un jodido monstruo, y lo peor de todo es que... Lo sabe...

Pero no sabe cómo puede cambiarlo. Que puede hacer para hacerlo. Para empezar de nuevo... Bueno, sabe que no va a poder empezar de nuevo pues su condena es de por vida.

Si pudiera hacer algo para lograr cambiar, no, aunque sea hacer algo bueno en su vida, lo haría...

Lo haría, no por satisfacción personal... Quizás lo haría para que al menos a sus hermanos le dijeran que hizo alguna cosa buena, algo que convierta a su miserable vida en una pizca menos miserable...

Algo que le dé sentido a vivir...

Y no, ha simplemente...sobrevivir porque sí... Él existe, si, pero no sé considera vivo...

La monotonía tras las rejas. El ambiente de pelea continua donde debe de luchar por su vida cada día, someter a los fuertes para ser el alfa en medio de esta manada de animales sin humanidad... Ver sus manos manchadas y mostrarse frío y sin emociones... No permitirse el llorar o el reír, eso no es vida.

Pasión por las piscinas 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora