Sentimientos Encontrados

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~Who said that love is painful? honey, love is not painful, painful is who you share that love with~

Me gustaría pensar que Alec está siendo cariño hasta el punto de quedarme a solas con él, ésto es deliberadamente incómodo, estar sólos en su habitación y él semi desnudo no ayuda para nada. Alec me mira fijamente mientras yo estoy de pie y sudando como puerca, estoy nerviosa y no tengo idea del por qué.

Alec me mira tan de cerca que mi corazón se acelera un poco «¿Pero que coño me pasa?»

—¿Que pasa?¿Estás nerviosa?– Dice el muy idiota y se acerca cada vez más con una sonrisa en el rostro.

—Déjate de jueguitos, estoy aquí para que me digas lo que está pasando, quiero saber todo.

Resopla por debajo y se le desvanece la sonrisa que tenía antes, se levanta y pasa por mi lado para dirigirse a un armario que está cerca de su cama. Saca una camiseta y se la pone para luego darse la vuelta.

—Deberias estar preparada para lo que tengo que decir–. Dice para luego sentarse en su cama.

Como no encuentro dónde sentarme abarco el lugar donde lo encontré anteriormente, halo el banquillo hasta posicionarme al frente de él.

Entrelazo mis manos y espero a que empiece a hablar.

—Tu padre es alguien muy poderoso cómo ya sabes y sus socios también, el hijo de uno sólo quiere tomar venganza por todo lo que causó tu padre.

—Si, ese tal Josh–. Aún no tengo muy claro eso.

—Josh Campbell era para él su mayor orgullo, el hijo que nunca tuvo.

—Mira que el hijodeputa no se quedó atras–. Digo impulsivamente.

—La verdad es que Josh sólo quería asumir el puesto de tu padre; todo iba bien hasta que el padre de él cometió un error muy grande.

—¿Y cuál fue?– Creo que ya me doy una idea.

—El haber confiado en una persona como Massimo Chiveretti–. Dice Alec lo cual me produce un escalofrío.

—¿Ese es el nombre de mi padre?–. Digo en voz alta lo que más temo.

—Es el nombre del mayor mafioso que existe y sólo por ser tu padre no significa que debes estar muy confiada de lo que podría causar.

Alec se acerca despacio hasta quedar frente mío, toma una de mis manos y me acaricia suavemente.

—Marina debes saber otra cosa–. Dice y toma un respiro antes de continuar.—Cuando era un crío no conté con la suerte de tener una familia, estuve viviendo en la calle y no tuve apoyo en nada ni por nadie.

Alec me mira a los ojos y me doy cuenta de que está hablando enserio, con su dedo traza un círculo en mi mano, caricia que tomo con gusto.

—Cuando no pude seguir así y estaba por acabar con mi vida alguien me salvó Marina–. Dice con la voz llorosa.—Ese alguien eres tú.

«¿Yo?¿Como carajos iba a ser yo?»

—Alec yo...

Mi Vida Entre Mentiras ® [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora