Le conoció en el peor de todos lo momentos de su vida. Era una época en la que se encontraba totalmente perdida, con el corazón destrozado. Dudaba sobre si algún día volvería a estar de una pieza. Y entonces le vio. Vestía elegante y era muy guapo. Pero su personalidad fue lo que realmente hizo que se enamorara. Era tan inteligente que supo cómo recolocar las minúsculas piezas de su corazón roto. Era tan romántico que cada mañana le traía un ramo de flores, cada día compraba unas diferentes.
Al agarrar su mano sentía que no se caería jamás. Que aquellos años solitarios, sin nadie con quien poder compartir su dolor, con ese vacío permanente en el pecho... Todo eso había finalizado.
Le daba igual donde estuviese mientras que él le acompañase. No importaba cómo de grande el mundo fuese, cuando estaban juntos se olvidaban del resto. Todo lo que les rodeaba no existía, era un momento tan solo de ellos dos. Su cuerpo entero estaba repleto de mariposas, cuando estaba, pensaba y soñaba con él. Era un cosquilleo constante.
Cuando ella se hallaba sola se dedicaba a revivir todos esos recuerdos. No necesitaba nada más en la vida, ese amor verdadero le llenaba el alma...
Y ese gran dolor y angustia en la que se había encontrado numerosas veces jamás regresó.
Y la felicidad, por fin, reinó su cuerpo.
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Relatos de amor
RomanceSi eres amante de las historias más románticas échale un vistazo... Cada capítulo es un relato diferente. Tratan de amor, desamor, ilusiones, decepciones, pensamientos, sentimientos, emociones... Esa clase de sentimientos guardados en lo más prof...