Tus palabras son cuchillos y tu lengua el filo. Es tan punzante que me atraviesa todo: la piel, los músculos, las venas, y a veces incluso los huesos. Tengo una herida que no puedo coser porque no consigo ver ni el principio ni el final. Camino rota, ahogada por mis lágrimas y la sangre de mi herida.
El trayecto por el que voy no es recto ni curvo, y no veo el final, pues me lo tapan los obstáculos tan altos como murallas. Entonces, ¿qué dirección tomo? Si todas tus palabras suenan por alguna parte y dejar de escucharte también duele.
A veces desearía que no hablaras en mi presencia, pero tu silencio también corta.
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Relatos de amor
RomanceSi eres amante de las historias más románticas échale un vistazo... Cada capítulo es un relato diferente. Tratan de amor, desamor, ilusiones, decepciones, pensamientos, sentimientos, emociones... Esa clase de sentimientos guardados en lo más prof...