¿Maestra Romanoff? ; scarletwidow / Wandanat

6° [NATASHA]

A mi lado yace el cuerpo desnudo de mi novia. ¿Por qué es tan jodidamente sexy?

Tuvimos una increíble noche... Puedo sentir que fue increíble en las marcas que arden de mi espalda. Carol está de espaldas por lo que aprovecho para despertarla con besos.

Mis labios vagan por los lunares pequeños que se ven en su espalda blanca, la rubia de cabello corto se remueve.

-¿Cariño? ¿Qué haces aquí aún? - Pregunta alarmada. - ¡Cariño, te quedaste dormida! - Me volteo y observo el reloj que marca las 8.50 de la mañana.

Oh, oh.

-Mierda, mierda. - Gruño y me levanto corriendo para vestirme. - Ya no alcanzo ni siquiera a ducharme, maldita sea.

-¿No desayunaras? - Niego. - Natasha no puedes...

-Amor, regañame cuando regrese. - Hago un puchero y ella suspira.

-Cómprate algo para comer. - Asiento rápidamente.

Luego de vestirme, bañarme en desodorante y besar 20 veces a mi prometida, corrí a la salida de mi hogar.

Debo llegar en 10 minutos a la universidad para alcanzar a justificarme con mis alumnos, la clase justamente es con los alumnos de ruso, no puedo ser así de inútil, maldita sea.

Una cosa buena puedo hacer por mis raíces y la hago mal.

Manejo por diferentes calles agradeciendo no vivir lejos del centro de la ciudad y de paso la universidad.

Mi cabeza duele.

Debo dejar de beber durante la semana, definitivamente sí bebo mucho no recuerdo nada al día siguiente, lo que sí recuerdo es la forma en que le hice el amor a Carol... Pero no puedo permitirme llegar tarde otra vez por ésto.

Al ingresar a la universidad, pongo mi tarjeta en la máquina y eso marca mi llegada, saludo a Barton y él me hace una seña por la hora riendo. Giro mis ojos y sonríe.

Al llegar al salón noto como todos están en su mundo, dejo mis cosas y comienzan a volver a la realidad.

-Buenos días, alumnos. - Hablo de manera alta. Todos me observan y responden al unísono el saludo. - Lamento la demora, necesito que abran su libro en la página...

Uno de mis alumnos aclara su garganta y me detengo. Me observa y yo a él.

-¿Sí? Dime.

-Hola, soy Peter, Peter Quill... - Murmura el muchacho musculoso. - Mire, maestra... De lindo cuerpo. - Sonríe y algunos ríen ante eso.

-Romanoff. - Corrijo.

-¿Cómo dice? - Pregunta fingiendo no escuchar.

-Para ti soy maestra Romanoff. - Vuelvo a corregir.

-Ah, okay. - Eleva una ceja y vuelve a sonreír de forma burlona. - ¿No cree que ya es tarde como para llegar a una clase? Son las nueve con diez, en veinte minutos acaba ésto. - Ríe y algunos murmuran que tiene razón.

-¿Peter, no? - Él asiente. - Bien, Peter, esto va para todos, lamento la demora. No volverá a ocurrir, tuve algo importante anoche y se me pasó la hora hoy. - Me giro nuevamente para escribir en el pizarrón pero Peter contesta.

-¿Y cómo va a justificarlo? Así como su tiempo es valioso, el nuestro también. - Suspiro y continúo escribiendo. - Anda ya, lo que tiene de buena, lo tiene de tonta.

Iba a girarme para contestar pero alguien fue más rápido que yo.

-Bueno y a ti... ¿Qué coño te pasa? - Gruñe una voz femenina. Me giro y no distingo a la dueña de la queja.